El avance científico no solo podrá ser empleado para la creación de prótesis biónicas y dispositivos de rehabilitación, sino también en el campo de la robótica blanda y la industria aeroespacial.
Un grupo de investigación de la Universidad Séchenov, Rusia, ha desarrollado músculos artificiales a base de hidrogel de alcohol polivinílico y agua que se activan con corriente eléctrica, comunicó la entidad académica al portal Gazeta.ru.
Según el medio, los músculos artificiales existentes hasta ahora estaban compuestos por actuadores que podían contraerse, doblarse o expandirse. No obstante, estos dispositivos tenían una velocidad de funcionamiento baja y podían fallar fácilmente si se excedía el voltaje eléctrico.
En ese contexto, los científicos de la universidad rusa crearon músculos a partir de hidrogel de alcohol polivinílico (polímero hidrofílico). En el material, al ser expuesto a la corriente alterna, los iones de agua no se desplazan hacia los electrodos, sino que oscilan en su lugar. Esto provoca que todo el hidrogel se caliente uniformemente, cambiando así la forma del músculo. Para lograr el efecto deseado solo se necesitan tres segundos.
«El hidrogel está cubierto por una capa elástica y sellada que se expande durante el proceso, como un globo inflado», explicó el investigador principal, Tarek Dayyoub, al medio, y agregó que para producir una expansión lineal utilizaron dos tipos de mallas de refuerzo externa, una tejida y otra en forma de espiral.
Los órganos artificiales obtenidos resultaron livianos y silenciosos, con buenas propiedades mecánicas y capaces de soportar cargas pesadas. Se destaca que este avance científico no solo podrá ser empleado con fines médicos para la creación de prótesis biónicas y dispositivos de rehabilitación, sino también en el campo de la robótica blanda y la industria aeroespacial.