Moscú dice que los aliados occidentales de Ucrania coordinaron junto con Kiev un ataque la semana pasada contra el cuartel general de la Flota rusa del Mar Negro en la Península de Crimea.
La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, María Zakharova, dijo en una sesión informativa el miércoles que el ataque fue «planificado de antemano utilizando medios de inteligencia occidentales, recursos satelitales de la OTAN y aviones de reconocimiento».
Zajarova añadió que el ataque, que tuvo lugar el 22 de septiembre, fue planeado y llevado a cabo a instancias y en estrecha coordinación con los servicios de inteligencia británicos y estadounidenses.
«El objetivo claro de estos ataques terroristas era desviar la atención del fracaso de la contraofensiva del ejército ucraniano e intimidar al pueblo, infundiendo pánico en nuestra sociedad», dijo Zajarova, expresando su convicción de que no lograrían sus objetivos.
Esto se produjo cuando el Ministerio de Defensa ruso publicó el video y las fotografías el martes, que muestran al comandante almirante Viktor Sokolov, uno de los oficiales navales de mayor rango de Moscú, participando en una reunión de líderes militares encabezada por el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu.
Kiev afirmó el lunes que sus fuerzas especiales habían matado a 34 oficiales, incluido Sokolov, en un ataque sin precedentes contra el cuartel general naval de la flota en la ciudad portuaria de Sebastopol, en la península de Crimea, la semana pasada.
Ucrania dijo que el ataque que abrió un gran agujero en el edificio principal de la sede había herido a 105 personas, sin proporcionar pruebas que lo respalden.
Zakharova dijo que Moscú está al tanto de la llegada de los tanques Abrams de fabricación estadounidense a Ucrania, y señaló que se ha suministrado «un número limitado» de tanques de «antiguas modificaciones».
«Según los expertos, esto no cambiará la situación en la zona de contacto de las fuerzas armadas de la Federación Rusa con las formaciones armadas del régimen de Kiev», afirmó.
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, anunció el lunes la llegada de tanques Abrams estadounidenses a Ucrania y dijo que “nos estamos preparando para reforzar nuestras brigadas”.
Los comentarios de Zakharova siguen a los comentarios hechos el martes por Dmitry Medvedev, el jefe adjunto del Consejo de Seguridad de Rusia, quien dijo que la llegada de tanques Abrams de fabricación estadounidense a Ucrania y la promesa de Estados Unidos de suministrar una cantidad no especificada de misiles ATACMS de largo alcance acercarían a la OTAN a un conflicto directo con Rusia.
Moscú ha advertido repetidamente que Estados Unidos y sus aliados de la OTAN se han involucrado efectivamente en el conflicto al suministrar armas a Ucrania, brindarle información de inteligencia y ayudar a planificar ataques contra instalaciones rusas.
Aunque Estados Unidos y otros socios occidentales han proporcionado equipo militar y entrenamiento a Ucrania, los funcionarios estadounidenses han negado anteriormente haber desempeñado un papel directo en el conflicto entre Rusia y Ucrania.
Informes de noticias no confirmados han dicho que en el ataque a la sede se utilizaron misiles Storm Shadow proporcionados a Ucrania por el Reino Unido y Francia.
La administración del presidente estadounidense Joe Biden ha suministrado armas a Ucrania por valor de más de 43.000 millones de dólares desde que Rusia lanzó su “operación militar especial” en Ucrania en febrero del año pasado.
Biden también anunció un nuevo paquete de ayuda militar por valor de 325 millones de dólares para Ucrania, que incluye sistemas de contraataque, municiones convencionales mejoradas de doble propósito y armas antitanques, entre otros, dijo el Departamento de Defensa de Estados Unidos en un comunicado de prensa la semana pasada.