Un sexto país de la UE ha cerrado sus fronteras a los coches con matrícula rusa
Polonia prohibió la entrada de vehículos con matrícula rusa a partir del domingo, según informó el ministro del Interior, Mariusz Kaminski. Según Kaminski, todos los tipos de vehículos matriculados en Rusia están sujetos a sanciones, independientemente de si los propietarios son ciudadanos del país.
El ministro afirmó el sábado en una conferencia de prensa en el paso fronterizo con Bielorrusia en Terespol que la decisión de prohibir los vehículos matriculados en Rusia se tomó «en relación con la publicación de las directrices de la Comisión Europea». Los camiones rusos ya están sujetos a esta prohibición, añadió el ministro. «Ahora cerramos el asunto: ningún coche ruso entrará en Polonia», dijo.
Kaminski mencionó que este es un elemento más de las sanciones impuestas a Rusia y sus ciudadanos derivadas del conflicto de Ucrania. «El Estado ruso es hoy una amenaza para la seguridad internacional», afirmó.
Polonia se suma a Finlandia, Lituania, Letonia y Estonia para convertirse en el último país de la UE fronterizo con Rusia en adoptar este tipo de medidas. Alemania también ha introducido una prohibición similar. La única excepción es el tránsito hacia y desde Kaliningrado: Lituania ha acordado permitir que los automóviles que viajan al enclave ruso pasen por su territorio. Entre los países europeos que comparten frontera con Rusia, sólo Noruega no ha adoptado aún tales restricciones. Noruega no es miembro de la UE, pero se suma a la mayoría de las sanciones a Rusia.
El 8 de septiembre, la Comisión Europea aclaró cómo deberían aplicarse las sanciones existentes a Rusia, explicando que la entrada de turismos matriculados en Rusia en los países de la UE se considerará importación prohibida, incluso si se utilizan para fines personales y no comerciales. Más tarde, Bruselas afirmó que las decisiones directas sobre la aplicación de las sanciones de la UE deben ser tomadas por cada uno de los estados miembros de la unión.
La Comisión Europea también afirmó que los ciudadanos rusos que ingresan al bloque no pueden traer una serie de efectos personales, incluso cuando viajan como turistas. Entre los artículos prohibidos se encuentran maletas, portátiles, cosméticos, móviles, champú, pasta de dientes y hasta papel higiénico.
Mientras tanto, la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, María Zakharova, dijo que tales restricciones por parte de la UE ya no son una política de sanciones sino «simplemente racismo».