Andrés Manuel López Obrador y Gustavo Petro critican la política de drogas impulsada por EE.UU. en América Latina.
Los presidentes de México, Andrés Manuel López Obrador, y Colombia, Gustavo Petro ratificaron este sábado el compromiso de sus Gobiernos de continuar luchando contra las drogas, durante la clausura de la Conferencia de Latinoamérica y el Caribe sobre Drogas, que sesionó en la ciudad colombiana de Cali, al tiempo que cuestionaron la política antidrogas impulsada en la región por sucesivos Gobiernos de los Estados Unidos.
Durante el mensaje conjunto que ambos ofrecieron al término del foro, el jefe de Estado mexicano subrayó que su país tiene la obligación de luchar contra el tráfico del fentanilo que luego se consume en los Estados Unidos.
Tenemos que actuar con humanismo y entender que tenemos ese deber independientemente de nuestras diferencias, dijo López Obrador.
Añadió que esta es una pandemia que no puede quedarse solo en el número, sino en los más de 100.000 jóvenes que pierden su vida cada año.
Al profundizar en la necesidad de atender este problema global con sentido humanista, López Obrador expresó que hay que atender a los jóvenes y ofrecerles empleo, buenos salarios, oportunidades de estudio y trabajo, y motivaciones.
Asimismo, instó a fortalecer los valores espirituales y utilizar la reserva de valores que las sociedades modernas de Latinoamérica y el Caribe heredaron de sus antiguas civilizaciones. Gracias a ellas nos hemos salvado frente a pandemias, malos Gobiernos y la corrupción, aseveró.
Por su lado, el presidente Petro aseguró que en el continente llevan más de medio siglo cumpliendo con las directrices de la lucha contra el tráfico dictadas desde la Unión Europea, la Organización de las Naciones Unidas y Estados Unidos.
En tal sentido, añadió que estas formas nunca fueron cuestionadas y se hizo un silencio cómplice del genocidio que provocó en el continente la implementación de esos enfoques.
«Nos da miedo decir que ustedes, que tienen la mayor parte de consumidores de esas drogas, están equivocados», dijo Petro refiriéndose a cómo Europa y Estados Unidos trasladan la culpa de la crisis provocada por el consumo al campesino pobre que cultiva las plantas de las que otros obtienen sustancias ilícitas, en lugar de atender la demanda.
Reiteró la idea de que una guerra tradicional contra las drogas, como la impulsada por Estados Unidos en los años 90, en que se priorizaba la erradicación y el intervencionismo militar, es una lucha fallida.
Llamó a crear la belleza a través del desarrollo de la democracia profunda y la construcción de una libertad verdadera del ser humano. Además, resaltó que lo importante es atender las causas estructurales de este problema, asociadas a la desigualdad, la pobreza, la falta de oportunidades y la violencia.
El fentanilo es un potente opioide sintético cincuenta veces más fuerte que la morfina, el cual ha causado la peor crisis de drogas de la historia de la nación norteña. Solo el pasado año perecieron más de 70.000 personas consecuencia de la sobredosis de esta sustancia prohibida.
Comprometidos con la Paz Total
Este sábado, los cancilleres de Colombia y México, Álvaro Leyva y Alicia Bárcena, respectivamente, suscribieron la carta de intención en materia de cooperación para contribuir a que se implemente el Acuerdo de Paz de 2016, firmado en La Habana, y la Política de Paz Total que promueve el Gobierno de Petro.
Bárcena destacó que este documento asume el fenómeno de las drogas desde una perspectiva integral y sienta bases para promover acciones en sectores de agricultura, educación, juventud y comercio, vitales para hacer frente al fenómeno de las drogas.
Por su parte, Leyva manifestó que la conferencia de Cali generó el preámbulo de un foro más amplio acerca de este desafíos, en el que se aspira estén presentes los jefes de Estado de Latinoamérica y del Caribe.