A poco más de un mes para las elecciones en Argentina, los analistas señalan a Javier Milei, del partido La Libertad Avanza, y a Sergio Massa, del partido Unión por la Patria, como los favoritos para disputar la segunda vuelta, y plantean la cuestión sobre el impacto que tendría el cambio de Gobierno en las relaciones con Brasil.
El ultraliberal Javier Milei fue el candidato más votado en las primarias, con el 29,86% de los votos. El diputado federal, elegido en 2021 por Buenos Aires, tiene polémicas propuestas para la economía, que incluyen la sustitución del peso argentino por el dólar y el cierre del Banco Central. Milei también ha defendido medidas como la legalización de la venta de órganos y el fin de las escuelas públicas.
Para Wanilton Dudek, doctor en Historia y profesor de la Universidad Estadual de Paraná, el resultado de las primarias no era esperado, pero se explica por el clima de incertidumbre que vive el país, sumido en una profunda crisis económica.
«Es sorprendente quién es Javier Milei: un candidato con ideas muy excéntricas que representa todo aquello que Argentina no necesita en este momento. Él está generando una inestabilidad total desde el punto de vista político, económico y social, sin embargo, la población, cansada de tanta incertidumbre en la economía, apuesta por estos candidatos con ideas más extremas. Milei se ha mostrado como el favorito, pero sigue siendo una carrera abierta», afirmó Dudek.
Por su parte, Christopher Mendonça, profesor de Relaciones Internacionales en el Ibmec, una universidad de investigación brasileña, y especialista en política comparada e internacional, destaca el revés sufrido por Sergio Massa, el candidato del partido gobernante, en las primarias. El actual Ministro de Economía obtuvo el 27,28% de los votos y quedó tercero.
«Las encuestas muestran que éste ha sido el peor desempeño del peronismo en Argentina en los últimos años. El peronismo siempre está entre la primera y la segunda fuerza política del país y, concretamente, en las primarias de este año quedó en tercer lugar. Las mayores expectativas de escenario son que haya una segunda vuelta entre Sergio Massa y Javier Milei», explicó Mendonça.
Aunque las elecciones primarias tenían por objeto oficial elegir a los candidatos de diversos bloques políticos, también se consideraron un sondeo nacional sobre la posición de los candidatos frente a los argentinos.
Cuando el grupo de los BRICS anunció su ampliación con seis participantes más, entre ellos Argentina, los candidatos presidenciales afirmaron que, en caso de ser elegidos, el país dejaría de formar parte del grupo. El discurso fue adoptado por Javier Milei y Patricia Bullrich, de la coalición Juntos por el Cambio.
A pesar de la declaración, el profesor del Ibmec opina que la cuestión no es prioritaria en este momento de la disputa electoral, argumentando que «Argentina está atravesando un proceso económico importante, una crisis inflacionaria, y la mayor preocupación que tendrán los votantes tiene que ver con cuestiones sociales». La victoria de Milei en las primarias «ya muestra que la población argentina está muy insatisfecha y, por lo tanto, quiere un Gobierno diferente».
«Creo que la entrada o no de Argentina en el BRICS no será algo que la población votante tenga en alta estima, pero sí tiene implicaciones directas en la economía del país, porque Argentina es un país que tiene perspectivas de aumentar su comercio exterior, y la adhesión al BRICS podría favorecer este comercio internacional», pronosticó.
De hecho, «gane quien gane esta reñida competición», el próximo presidente se enfrentará a muchos retos, planteó Wilton Dudek.
«Habrá muchos retos para el sucesor de Alberto Fernández. Desde el punto de vista de las relaciones internacionales, Argentina necesitará recuperar la confianza, demostrar que se está estableciendo la estabilidad política y económica en el país. Internamente, el gobierno argentino necesitará recuperar la confianza de la población», profundizó.
En cuanto a la perspectiva económica, Brasil ha mostrado gran interés en ayudar a su vecino a reducir el impacto de la crisis. Entre los analistas, hay consenso sobre el interés del Gobierno de Luiz Inacio Lula da Silva en la victoria de Massa, que, en teoría, representaría un mantenimiento del actual nivel de cooperación bilateral.
«Está claro que el candidato que más se acerca a las expectativas brasileñas es Sergio Massa. Incluso ha sido embajador de Argentina en Brasil y, por lo tanto, tiene un diálogo muy estrecho con la diplomacia brasileña. Así es que su victoria sería el escenario más favorable para la política de Brasil. Por otro lado, la política exterior brasileña siempre ha sido muy pragmática, especialmente con Argentina, que es un importante socio comercial. Hemos tenido épocas anteriores en las que no había paridad entre los dos Estados y las diferencias han quedado atrás. Obviamente, cuando hay alineamiento entre los presidentes, hay mayor armonía y mayor flujo comercial. Pero, desde luego, esto no afectará a las relaciones, que son muy amistosas entre los dos países», explicó Christopher Mendonça.
Para Thiago Rodrigues, profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad Federal Fluminense (UFF), a pesar del pragmatismo de Brasil, dependiendo de quién triunfe, el resultado de las elecciones argentinas podría dificultar mucho más las relaciones entre los dos países.
Rodrigues subraya que, al estar más próximo y en sintonía con el Gobierno de Lula, Massa comparte los mismos puntos de vista que el líder brasileño en materia de política social, alineamiento de la política exterior (BRICS, Mercosur, Unasur) y también en el ámbito del respeto a los contratos internacionales y la explotación de las fuentes de energía no renovables.
Los candidatos más izquierdistas, Juan Schiaretti y Myriam Bregman, «tienen programas muy radicales para el Partido de los Trabajadores de Lula, como cobrar impuestos a las grandes fortunas y romper con el FMI».
«Por otro lado, la derechista Patricia Bullrich [exministra de Seguridad de Macri] y, sobre todo, el ultraderechista Javier Milei, no tienen ninguna afinidad con la socialdemocracia de Lula. En caso de victoria de Milei, las relaciones bilaterales se volverían muy difíciles, incluida la promesa de incluir a Argentina en los BRICS», resumió.
Las elecciones generales argentinas se celebran el 22 de octubre y, en función del resultado, pasarán a la segunda ronda el 19 de noviembre