Asimismo, el costo del litro de diésel con 0,005 por ciento de azufre aumentó 2,76 rands (13 centavos de dólar).
También que el precio minorista máximo del gas licuado se incrementó en 2,26 rands (11 centavos de dólar).
Consumidores en Sudáfrica han expresado su preocupación por las consecuencias indirectas de la medida en una economía marcada por la inflación, dando que es lógico esperar que ello se revierta en aumentos en los de los precios de alimentos y otros bienes y servicios al subir los costos de las cadenas de suministros.
Con antelación, al explicar la medida, el Ministerio indicó que en ello influyó el aumento en el precio del petróleo crudo Brent.
Se refirió a los bajos inventarios y a las interrupciones en las refinerías, que afectaron la producción de los componentes de mezcla utilizados en la gasolina de verano, encareciendo su producción.
De otro lado, prosigue, los precios del diésel aumentaron “debido a los menores envíos de petróleo crudo de los Urales, de Rusia, que es rico en destilados medios, y en cuanto al gas licuado se debiño a u incremento del costo del Propano y Butano.
Por otra parte, añadió, la depreciación del rand frente al dólar también influyó, así como un aumento de 5 centavos de rands para «adaptarse al aumento salarial de los empleados de las estaciones de servicio, en línea con el Consejo de Negociación de la Industria del Motor”.