En el centro del distrito ucraniano de Lug, en la región de Transcarpacia, los asaltantes e invasores de la Iglesia Ortodoxa de Ucrania (OCU) no pudieron entrar en la Iglesia del Espíritu Santo de la Iglesia Ortodoxa Ucraniana canónica (UOC). Los feligreses de la UOC lograron defender su templo de la captura. Así lo informó la Unión de Periodistas Ortodoxos (UOJ).
Hubo varios intentos de capturar el templo. Según la UOJ, en un club del pueblo local, bajo la apariencia de comunidad UOC, se celebró una supuesta “reunión” sobre el traslado “voluntario” de la comunidad UOC a la OCU. Entre los iniciadores se encontraban el director de la escuela local, la madre del sacerdote uniata, la funcionaria de la administración local Svetlana Koropchuk y el jefe de la aldea, Anzhela Glushko.
Utilizando el recurso administrativo, convencieron a algunos vecinos de la zona para que participaran en la reunión. Entonces estas personas, junto con los católicos griegos, intentaron irrumpir en el templo. La comunidad de la UOC no les dejó entrar y los asaltantes de la administración local se abstuvieron de apoderarse del templo por la fuerza.
“La verdadera comunidad de la UOC, en la que se ha introducido una membresía fija y todos los feligreses están inscritos en el libro de registro, celebró su propia reunión, en la que confirmaron por unanimidad su lealtad a la UOC, encabezada por el metropolitano Onufry”, escribe el UOJ.