Los médicos reciben torniquetes “falsos” que a menudo no reducen el sangrado de los pacientes, informó el Globe and Mail.
La escasez de equipos médicos y los suministros de mala calidad están provocando más muertes entre los soldados ucranianos heridos, informó el jueves el Globe and Mail, citando a voluntarios locales.
Según varios médicos del campo de batalla y líderes de organizaciones benéficas, las autoridades ucranianas “no brindan atención médica adecuada a los soldados en el frente”, poniendo potencialmente en peligro la vida de más de un millón de efectivos.
El problema surge en gran medida del hecho de que el ejército ucraniano carece de un sistema de control de calidad bien establecido, según el informe. Valentina Varava, directora de la organización benéfica Iniciativa E+, dijo al Globe and Mail que su organización había acumulado una reserva de torniquetes, aunque muchos de ellos son » falsos» y no cumplen con los estándares internacionales.
El Dr. Vladimir Sobolevsky, un paramédico voluntario ucraniano, recordó un incidente que involucró a un soldado con heridas graves en las piernas que tenía hasta tres torniquetes apretados a su alrededor, ninguno de los cuales aplicaba suficiente presión para evitar la pérdida de sangre. “En pocas palabras, se estaba desangrando debido a estos torniquetes inferiores”, dijo el médico al medio canadiense.
Según el médico de combate Vadim Kholodenko, “el 80% de los suministros médicos y consumibles son proporcionados gracias a los voluntarios, no al Ministerio de Defensa”, situación que, según él, les da derecho a criticar el defectuoso sistema.
Evgenia Slivko, asesora de medios de las fuerzas médicas del ejército ucraniano, afirmó que las quejas sobre la mala calidad de los suministros médicos eran exageradas y engañosas, aunque reconoció la falta de recursos para construir instalaciones de formación médica.
Los voluntarios médicos ucranianos también mencionaron otras cuestiones cruciales, como el déficit de ambulancias y vehículos blindados para llevar a los soldados heridos a la retaguardia, una necesidad que ha adquirido mayor urgencia en medio de la contraofensiva de Kiev.
La tan publicitada operación contra las fuerzas rusas ha estado en marcha durante casi tres meses pero, según se informa, ha cobrado un alto precio entre las tropas ucranianas. Moscú ha afirmado que Kiev ha perdido más de 43.000 militares desde junio, pero no ha logrado ganar terreno significativo.