El motor económico de la Unión Europea seguirá estancado a pesar de la caída de la inflación, advierte el banco central alemán
La producción económica alemana se estancó en el segundo trimestre de 2023 después de contraerse en los dos trimestres anteriores, y se espera que el crecimiento se mantenga moderado en el corto plazo, informó el lunes el Bundesbank.
“Es probable que la producción económica vuelva a estancarse más o menos en el tercer trimestre de 2023”, escribió el banco central en un informe mensual.
Según las previsiones, la producción industrial seguirá siendo débil, ya que últimamente la demanda exterior ha mostrado una tendencia a la baja.
“Los elevados costes financieros probablemente seguirán pesando sobre la inversión. También siguen frenando la demanda en el sector de la construcción, lo que probablemente se reflejará cada vez más en la producción”, afirmó el regulador alemán.
El Bundesbank también dijo que el gobierno alemán registrará un déficit significativo en 2023 mientras continúa brindando un amplio apoyo relacionado con la crisis a empresas y hogares, principalmente mediante el uso de frenos a los precios de la energía.
En el lado positivo, el informe predijo que debido a la estabilidad del empleo y el fuerte crecimiento de los salarios, así como a la disminución de la inflación, es probable que continúe la recuperación del consumo privado, lo que también dará un impulso al sector de servicios.
El Fondo Monetario Internacional pronosticó el mes pasado que Alemania será la única economía del G7 que se contraerá este año, mientras lucha con las consecuencias de la crisis energética.