El presidente de Colombia, Gustavo Petro, participará hoy en la Cumbre por la Amazonía ‘Unidos por nuestros bosques’, que se realizará en la ciudad de Belém do Pará, Brasil.
Durante dos días, gobernantes y ministros de ambiente de los países que comparten el Bioma Amazónico se encontrarán para fortalecer los mecanismos de protección del medioambiente y detener la deforestación en la Amazonía para el 2030.
Petro suscribirá con los presidentes de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; de Bolivia, Luis Arce; Perú, Dina Boluarte, y Venezuela, Nicolás Maduro; el primer ministro de Guyana, Mark Anthony Phillips, y los cancilleres de Ecuador, Juan Carlos Holguín, y Surinam, Albert Ramdin, el documento ‘Unidos por nuestros bosques: Comunicado conjunto de los países forestales en desarrollo en Belém’.
Esta cita se realiza un mes después del Encuentro Camino a la Cumbre Amazónica en Leticia, reunión técnico-científica liderada por Colombia y en la que participaron delegados de Bolivia, Brasil, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela, así como los presidentes Petro y Luiz Inácio Lula da Silva.
También, previo a la reunión de mandatarios en Belém do Pará se realizaron las reuniones Diálogos Amazónicos y de ministros de Relaciones Exteriores y Medio Ambiente de los países signatarios del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA).
De acuerdo con la agenda, el gobernante colombiano asistirá este martes a la reunión de jefes de Estado de los países signatarios de la OTCA y en la tarde será el debate general de los gobernantes de los Estados miembros de este tratado y finalmente, se adoptará la Declaración de Belém.
Petro, durante su discurso en el Encuentro Camino a la Cumbre Amazónica en Leticia, consideró necesario transformar todo el sistema económico mundial para lograr la defensa de la vida.
Al referirse a los países responsables de la crisis climática señaló que la presión de los pueblos amazónicos «tiene que encaminarse a hacia ese derrotero y es ahí donde está el progresismo político y la unidad de los pueblos: transformar ese sistema económico en función de la vida.»
Esa, dijo el gobernante, es una revolución de la vida en los tiempos de hoy y la selva amazónica es centro de ese cambio.