Las autoridades de Rusia han negado este lunes que exista la necesidad de una nueva movilización a causa de la retirada de miembros del Grupo Wagner de varias líneas de frente en Ucrania como consecuencia de la breve rebelión protagonizada el 24 de junio por su jefe, Yevgeni Prigozhin.
El presidente del Comité de Defensa de la Duma Estatal rusa, Andrei Kartapolov, ha recalcado que «no será necesaria una nueva oleada de movilización», antes de subrayar que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, lo ha dicho previamente «de forma clara y específica».
«Hay un proceso planificado de reclutamiento de personal militar con contrato, una formación planificada de formaciones y unidades, incluidas las reservas, así como su entrenamiento», ha dicho, al tiempo que ha reiterado que «no hay necesidad de una movilización a día de hoy ni en el futuro próximo».
En este sentido, ha sostenido en declaraciones concedidas a la agencia rusa de noticias TASS que «no hay una amenaza de descenso del potencial de combate, ni a medio ni a largo plazo». «En el momento de la rebelión, no había empleados del Grupo Wagner en el frente. Estaban en campamentos. La ofensiva (ucraniana) ha sido repelida prácticamente sin su participación», ha zanjado.
Prigozhin encabezó el 24 de junio una rebelión que incluyó el avance de sus fuerzas hacia la capital, Moscú, si bien horas después se alcanzó un acuerdo que implicó el repliegue de los miembros del Grupo Wagner de cara a su posible integración en el Ejército y la retirada de los cargos para los implicados. Además, Prigozhin se trasladaría a Bielorrusia, donde ya se encuentra.