La ministra alemana de Asuntos Exteriores, Annalena Baerbock, y el ministro de Economía y vicecanciller de Alemania, Robert Habeck, actúan en interés de Ucrania y no de su patria, declaró el diputado Markus Frohnmaier en una reunión del Bundestag (Parlamento alemán).
«Quiero preguntarle, señor Habeck, ¿es usted realmente nuestro ministro de Economía? ¿O el ministro de Economía de Ucrania? ¿Los intereses de quién representa, los de Alemania o de otros países? Nuestros ciudadanos conocen la respuesta. Tenemos el Gobierno de Bandera Baerbock y Volodímir Habeck», afirmó.
Stepán Bandera fue un ultranacionalista ucraniano que ejerció como líder de la Organización de Nacionalistas Ucranianos en la primera mitad del siglo XX. Sus ideas antijudías, antirrusas y antipolacas lo hicieron acercarse a la Alemania nazi antes y durante su invasión a la URSS, y estuvo personalmente detrás del exterminio de civiles. Volodímir Habeck es una referencia al actual presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski.
Frohnmaier recordó a la ministra de Exteriores su declaración de que una promesa a Ucrania era más importante que la opinión de los votantes alemanes. También le enfadaron las palabras de Habeck sobre la intención de suspender la industria en Alemania antes de que «la gente se congele» si se corta el suministro de gas ruso.
Anteriormente, el eurodiputado irlandés Mick Wallace había denunciado que la política de Baerbock no pretende beneficiar al Estado, sino propiciar una guerra proxy de EEUU junto con la OTAN que solo sirve a los intereses de las élites y avivar el conflicto de Ucrania, «condenando a muerte» a ucranianos «menos privilegiados».
Rusia lanzó la operación militar especial en Ucrania en respuesta a la solicitud de las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, previamente reconocidas por Moscú como Estados soberanos, para que se les preste ayuda frente al genocidio por parte de Kiev.
Moscú asevera que EEUU, y otros países de la OTAN, se implicaron en el conflicto con el envío de grandes cantidades de armas a las tropas ucranianas, que desde mediados de febrero 2022 intensificaron sus ataques contra los civiles de las repúblicas de Donbás.