Según los informes, los funcionarios se han reunido con los jefes de los supermercados para negociar recortes de precios, informó el medio.
Los funcionarios del Reino Unido están discutiendo con representantes del sector minorista formas de controlar la inflación en espiral de los comestibles sin imponer límites de precios, informó CNBC el lunes.
No se está considerando obligar a los supermercados a reducir los precios, dijo un portavoz del gobierno a CNBC por correo electrónico, y agregó que cualquier esquema para ayudar a reducir los precios de los alimentos para los consumidores sería voluntario.
“Sabemos la presión a la que están sometidos los hogares con el aumento de los costos y, aunque la inflación está bajando, los precios de los alimentos siguen siendo obstinadamente altos. Es por eso que el primer ministro y el canciller se han estado reuniendo con el sector alimentario para ver qué más se puede hacer”, decía el comentario.
La administración del primer ministro del Reino Unido, Rishi Sunak, está elaborando un mecanismo que implicaría que los supermercados mantuvieran voluntariamente precios bajos en alimentos básicos, informó el Sunday Telegraph, citando fuentes.
El secretario de Salud británico, Steve Barclay, descartó los límites de precios de los alimentos en una entrevista con la BBC y dijo que el gobierno buscaba “discusiones constructivas con los supermercados sobre cómo trabajamos juntos, no sobre ningún elemento de compulsión”.
La iniciativa del gobierno del Reino Unido se hace eco de las medidas introducidas recientemente en Francia, donde los principales supermercados acordaron reducir los precios después de que el presidente Emmanuel Macron pidiera a los minoristas que redujeran sus márgenes para luchar contra el alza de los precios de los alimentos. En marzo, los supermercados franceses redujeron los precios de unos 50 artículos básicos que componen la llamada «canasta de alimentos antiinflacionaria».
Aunque la inflación general en el Reino Unido se redujo al 8,7 % en abril desde la lectura del 10,1 % en marzo en medio del enfriamiento de los precios de la energía, la inflación de los alimentos se ha mantenido obstinadamente alta. El crecimiento de los precios de los comestibles alcanzó el 19,1% en abril, que es la tasa más alta en más de 45 años, según la Oficina de Estadísticas Nacionales.