El comandante de las Fuerzas Terrestres de Ucrania, el coronel general Oleksandr Syrskyi, ha asegurado que las últimas contraofensivas han convertido Bajmut en una «ratonera» para los mercenarios del Grupo Wagner.
«Han caído como ratas en una ratonera», ha contado en su cuenta de Telegram. «Hemos recurrido a operaciones de contraofensiva en algunas direcciones cerca de Bajmut. El enemigo tiene más recursos, pero hemos destruido sus planes», ha dicho.
Syrskyi ha concluido afirmando que las operaciones continuarán, al tiempo que ha agradecido las «hazañas en el campo de batalla» y los esfuerzos de todos y cada uno de los soldados que continúa luchando por la defensa de Bajmut.
Las autoridades ucranianas han asegurado que han logrado retroceder varios kilómetros a los mercenarios de Wagner hacia el norte y el suroeste de Bajmut. De hecho, la viceministra de Defensa de Ucrania, Hanna Malyar, ha cifrado en 20 kilómetros cuadrados el territorio recuperado.
En la situación actual, nuestras tropas están haciendo todo lo posible y aun más. El hecho de que la defensa de Bajmut dure tantos meses y haya avances en ciertas áreas es gracias a la fortaleza de nuestros combatientes y el alto nivel de profesionalismo del comando de defensa», ha añadido Malyar.
Finalmente, Malyar ha concluido afirmando que las Fuerzas Armadas rusas superan a las ucranianas «en la cantidad de personas y armas», si bien ha recalcado que las operaciones defensivas de las tropas ucranianas han impedido que Moscú se haya hecho con el control de Bajmut.
Por su parte, el jefe de los mercenarios de Wagner, Yevgeny Prigozhin, ha asegurado también este martes que sus hombres han logrado ciertos avances en las calles de la ciudad de Bajmut, mostrando un mapa con los espacios que aún siguen bajo control de las tropas ucranianas.
Bajmut, en la región de Donetsk, es en estos momentos el principal escenario en el que se está dirimiendo esta guerra. Desde hace varios meses se ha convertido en el principal foco de los combates, a pesar de que algunos analistas cuestionan su valor estratégico, una vez Rusia no ha podido hacerse con ella como esperaba.
Así, después de que las batallas por Bajmut hayan pedido su significado original para Rusia, ambos bandos se hallan empantanados en persistentes batallas en las que parece estar más en juego una cuestión de reputación que puramente estratégica.