Mientras el mundo observa cómo el Reino Unido corona a su nuevo rey, las protestas trastornan la ocasión y la policía de Londres lanza una ofensiva contra los manifestantes que piden el fin de la monarquía.
Esto se produjo después de que las encuestas previas al día de la coronación sugirieran que la familia real británica es tan impopular como siempre desde que comenzaron las grabaciones.