Los enfermeros británicos comenzarán una huelga en busca de una “adjudicación salarial histórica” tras el fracaso de la negociación con el Gobierno.
Los miembros del Real Colegio de Enfermería (en inglés: Royal College of Nursing, RCN) —el sindicato de enfermería más grande del Reino Unido— convocaron a una huelga desde el domingo hasta los últimos momentos del lunes para obtener mejores salariales y la inmediata reanudación de las negociaciones con el Gobierno británico.
Además, los trabajadores de ambulancias en algunas áreas se unirán a la huelga el lunes y martes, marcando el sexto mes consecutivo de protestas de los trabajadores del Servicio Nacional de Salud (NHS, en inglés) del Reino Unido.
La secretaria general del RCN, Pat Cullen, dijo en una carta al ministro de Sanidad, Steve Barclay, que lo que los funcionarios han ofrecido hasta el momento “simplemente no es suficiente”. Asimismo, puso de relieve que “el Gobierno tiene que aumentar lo que ya se ha ofrecido y seremos muy críticos con cualquier medida que pretenda reducirlo”.
Tras una votación histórica para ir a la huelga, nuestros miembros esperan una adjudicación salarial histórica”, subrayó Cullen, urgiendo al Gobierno a presentarles “una oferta significativamente mejor” lo antes posible. En este sentido, prometió que continuarán “haciendo que sea imposible ignorar la voz de la enfermería”.
A modo de colofón, hizo hincapié en que “si el Gobierno tratase a los enfermeros con justicia, esta situación lamentable ya habría terminado. Estamos intensificando las acciones porque hasta ahora la huelga no ha producido una oferta satisfactoria por parte de los ministros”.
La huelga se convocó después de que los miembros del RCN rechazaran una oferta del Gobierno a las enfermeras de un aumento salarial del 5 % para 2023-2024 y un pago único de al menos 155 libras esterlinas para complementar el salario del año pasado, dependiendo del grado del personal. La oferta fue rechazada por 54 % a 46 %.