Un estudio reciente reveló que ha habido alrededor de 6500 casos de agresión sexual en hospitales del Reino Unido desde 2019.
El secretario de Salud del Reino Unido, Steve Barclay, está listo para dar el visto bueno a una iniciativa que haría que los trabajadores de la salud usen cámaras corporales mientras están de servicio en un movimiento diseñado para contrarrestar las alarmantes estadísticas de violaciones y agresiones sexuales en los hospitales, informó The Telegraph el lunes.
Barclay tiene «claro que la violencia sexual o la mala conducta de cualquier tipo es inaceptable y no tiene cabida en el NHS (Servicio Nacional de Salud)», dijo el Telegraph citando a una fuente gubernamental no identificada el lunes. El gobierno está «decidido a trabajar en estrecha colaboración con el NHS para erradicar este comportamiento vil», agregó la fuente.
Parece que la medida recibirá luz verde después de la publicación de un informe la semana pasada que encontró que ha habido al menos 6.500 casos registrados de violación o agresión sexual en hospitales del Reino Unido desde 2019. Solo 256 de estos, o el 4%, resultaron en una acusación o citación formal.
Heather Binning, fundadora de la Red de Derechos de la Mujer (WRN, por sus siglas en inglés), dijo el lunes que los datos eran «verdaderamente espantosos» y mostraban que los hospitales del Reino Unido se han convertido «casi en un mercado para los agresores sexuales» y que «las cifras muestran que los hospitales son simplemente lugares no seguros.”
Se anticipa que la información registrada en cámaras corporales podría ayudar a aumentar las tasas de enjuiciamiento y actuar como un elemento disuasorio potencial para futuros delincuentes.
El uso de cámaras corporales se probó en un hospital de Oxford, y el Telegraph informó que fue bien recibido por el personal. También se entiende que los sindicatos están en gran medida detrás de la idea, a pesar de las preocupaciones por la privacidad.
“Evitar que estos ataques ocurran en primer lugar es una prioridad”, dijo Kate Davies, directora de puesta en marcha de servicios de agresión sexual del NHS.
Las medidas adicionales que se introducirán incluyen la implementación de un centro de datos de prevención de la violencia y el análisis de AI de las tendencias de agresión que pueden ayudar a indicar situaciones en las que el personal del hospital podría estar en riesgo.