La líder del partido opositor francés Agrupación Nacional, Marine Le Pen, ha reprochado a Macron que «desprestigiar a las instituciones» con polémicas como la de la reforma de las pensiones.
La realidad es que Emmanuel Macron siente un placer asombroso al enfrentar a los franceses entre sí, vapuleando al pueblo francés y gobernando contra ellos», ha afirmado Le Pen durante su intervención en un programa de la televisión francesa RTL.
En particular ha criticado la «pueril» rapidez con la que Macron ha promulgado la ley de reforma de las pensiones. «Esta reforma de las pensiones demuestra que está en un estado de ánimo de provocación», ha añadido.
Así, ha advertido a Macron que no es posible «gobernar contra los franceses» y le ha sugerido «tres soluciones» para «salir del conflicto»: el referéndum, la disolución de la Asamblea Nacional o su dimisión. «Creo que no puede evitar una de estas tres soluciones si quiere respetar el espíritu de nuestras instituciones», ha argumentado.
Para Le Pen «tenemos una primera ministro completamente calcinada, un Gobierno desacreditado, un presidente en disputa, una Asamblea Nacional inquieta y una mayoría sumida en las dudas».
En cuanto a su futuro político, Le Pen ha asegurado que a día de hoy ella es «la candidata natural» de Agrupación Nacional para las elecciones de 2027, aunque ha reconocido que «puede que no sea así en tres años».
Sobre su padre, el histórico líder ultraderechista Jean-Marie Le Pen, hospitalizado el sábado, Le Pen ha enviado un mensaje de tranquilidad. «Todavía no lo he visto, pero será pronto. Está bien. Esa es la información esencial», ha señalado.
Mi padre llega estupendamente a su 95 cumpleaños y por eso, de vez en cuando, son necesarias algunas visitas al hospital para hacer ajustes», ha explicado.
Le Pen es ahora mismo la que lidera las encuestas con vistas a las elecciones presidenciales, seguido del líder del bloque de izquierda, Jean-Luc Mélenchon, y del propio Macron, que se ha hundido en las encuestas debido a las protestas contra la reforma que eleva de 62 a 64 la edad de jubilación.