El periódico cree que al parecer Lloyd Austin les dijo que se mantuvieran a una distancia de unos 80,4 km de la península.
El secretario de Defensa de los EE. UU., Lloyd Austin, aparentemente ordenó a los pilotos de la Fuerza Aérea de los EE. UU. que no volaran cerca de la península de Crimea, sino que se mantuvieran a una distancia de unos 80,4 km de ella. Así lo informó el domingo The Washington Post , que estudió los documentos secretos del Pentágono y de la inteligencia estadounidense que subieron a Internet.
Uno de ellos muestra un mapa del Mar Negro, que muestra las áreas donde pueden volar los aviones de reconocimiento. Sus fronteras comienzan a unos 19,3 km de la costa de Crimea, «lo que está en consonancia con el derecho internacional», afirma la publicación. Sin embargo, el mapa también dibuja una línea a unos 80,4 km de la península marcada como Separación dirigida por SECDEF, que, según la publicación, «indica que Austin probablemente ordenó a los pilotos estadounidenses que mantuvieran los aviones alejados de la península».
Otro documento dice que entre el 29 de septiembre de 2022 y el 26 de febrero de 2023, aviones franceses y británicos realizaron vuelos de observación sobre el Mar Negro con una tripulación a bordo, mientras que la Fuerza Aérea de EE. UU. utilizó vehículos aéreos no tripulados, incluido el RQ-4 Global Hawk, RQ-170 Sentinel y MQ-9 Reaper. Como se explica en los materiales, cada mes había varios vuelos de este tipo. El documento está marcado como SECRETO/NOFORN, lo que prohíbe su transferencia a ciudadanos no estadounidenses. Detalla la respuesta de Rusia a los sobrevuelos de aviones estadounidenses, británicos y franceses.
Entonces, el documento describe el incidente que ocurrió el 29 de septiembre. El secretario de Defensa británico, Ben Wallace, dijo anteriormente que uno de los cazas rusos Su-27 disparó un misil muy cerca del avión de reconocimiento británico RC-135 Rivet Joint, «realizando patrullas de rutina» en el espacio aéreo internacional sobre el Mar Negro.
Según Wallace, discutió el incidente con el ministro de Defensa ruso, Sergei Shoigu.
Según el jefe del departamento militar británico, una auditoría realizada por las autoridades rusas mostró que el Su-27 disparó el misil por error. Moscú no ha comentado sobre el incidente. El documento dice que un caza ruso supuestamente «casi derribó» un avión británico frente a la costa de Crimea. Según la publicación, este incidente destaca el «equilibrio,