La escasez de verduras frescas podría convertirse en un lugar común en el Reino Unido en un futuro próximo, advierten los agricultores
Es posible que los consumidores del Reino Unido tengan que acostumbrarse a los estantes vacíos en los supermercados debido a la escasez sin precedentes de verduras frescas en medio de una inflación récord de los precios de los alimentos y el aumento vertiginoso de los costos de la energía, informó Reuters el martes.
Los compradores británicos han estado experimentando una escasez de alimentos frescos durante meses, ya que las ventas de tomates, pepinos, pimientos y algunas frutas se vieron limitadas por la mayoría de los supermercados más grandes del país debido a la escasez de suministro. Las malas condiciones climáticas han interrumpido las cosechas en Europa y el norte de África, mientras que la inflación llevó a mayores costos para los productos de los mercados clave del Reino Unido, como España, dijo el medio.
Gran Bretaña importa alrededor del 95% de sus tomates durante el invierno, según el British Retail Consortium. En enero, el Reino Unido compró 266.273 toneladas de verduras, la cantidad más pequeña para cualquier enero desde 2010, cuando la población del país era un 7% menor que en la actualidad, según mostraron los datos de la oficina de impuestos.
Esto se produce cuando los consumidores británicos están lidiando con una inflación récord de los precios de los comestibles, que aumentó al 17,5% en las cuatro semanas hasta el 19 de marzo.
Los analistas dicen que la reducción de la oferta está generando costos más altos, mientras que la salida del país de la UE plantea un mayor desafío logístico para traer vegetales a la isla, ya que los exportadores se ven desalentados por el papeleo adicional.
Mientras tanto, los agricultores británicos están luchando con costos de energía más altos, lo que reduce su capacidad para cultivar frutas y verduras en invernaderos con calefacción.
«Existen riesgos reales de que los estantes vacíos se vuelvan más comunes», dijo a Reuters la presidenta del Sindicato Nacional de Agricultores, Minette Batters.
El sindicato espera que la producción de hortalizas frescas sea la más baja este año desde 1985 debido a la decisión de excluir a la agricultura de un plan de apoyo del gobierno que brinda ayuda a las empresas afectadas por los altos costos de la energía. Los agricultores también advierten que la escasez de tomates se extenderá a otros cultivos locales, como la coliflor y las zanahorias.