Cientos de artistas, incluidos ganadores del Oscar, han firmado una carta abierta dirigida al presidente Emmanuel Macron
Las principales figuras del cine y la televisión de Francia, incluida la actriz Juliette Binoche y el director Michel Hazanavicius, se dirigieron al presidente Emmanuel Macron en una carta abierta denunciando los controvertidos planes de reforma de las pensiones que han provocado airadas protestas en todo el país.
La petición fue publicada por el periódico Liberation el miércoles.
Los artistas se han sumado a la oposición masiva al proyecto de ley de pensiones que aumentaría la edad de jubilación en Francia de 62 a 64 años. La petición califica el cambio de » injusto, ineficaz, que afecta a los más precarios y a las mujeres más duramente, rechazado por la gran mayoría de la población, e incluso una minoría en la Asamblea Nacional». Las celebridades francesas exigen una «retirada inmediata» de la medida.
La petición llamó especialmente la atención sobre el «impacto de la reforma en los artistas y cineastas». En particular, el texto cita encuestas que muestran que » los roles se ofrecen con menos frecuencia a mujeres mayores de 50 años» y, por lo tanto, la nueva edad de jubilación pondría a las actrices en una posición más vulnerable.
La carta fue firmada originalmente por 300 actores, cantantes y cineastas franceses, pero hasta el sábado había reunido más de 1.800 firmas en el sitio web Change.org.
Binoche es uno de los nombres más importantes entre los que firmaron la petición. Su carrera como actriz abarca más de 40 años y ha aparecido en más de 60 largometrajes. Binoche tiene múltiples premios de cine francés y ganó un prestigioso Oscar a la Mejor Actriz de Reparto en 1997 por su papel en The English Patient. Del mismo modo, otro firmante de la carta, Michel Hazanavicius, ganó el Premio de la Academia al Mejor Director en 2011 por su película The Artist.
Las manifestaciones contra la reforma de las pensiones francesas han estado ocurriendo desde enero, cuando el proyecto de ley aún estaba en progreso. El jueves, más de un millón de manifestantes salieron a las calles, según el Ministerio del Interior francés. Esto siguió a la decisión de la semana pasada del gobierno de Macron de usar el privilegio ejecutivo para aprobar la reforma de pensiones sin una votación parlamentaria. La situación se ha intensificado hasta convertirse en enfrentamientos entre los manifestantes y la policía, lo que genera preocupación por parte del comisionado de derechos humanos del Consejo de Europa.