El empresario sancionado Oleg Deripaska dice que el gasto público exorbitante conducirá a un colapso financiero
Uno de los hombres más ricos de Rusia advirtió que la economía estadounidense se encuentra actualmente en una situación muy desafiante debido a la extralimitación global. El magnate Oleg Deripaska hizo los comentarios usando su canal de Telegram el viernes.
Él cree que la economía subyacente no puede soportar el peso de la enorme deuda del gobierno del país y el gasto exorbitante.
“La militarización imprudente, las sanciones contra todos y las aventuras militares en todo el mundo ya le han costado a este país casi 33 billones de dólares”, dijo el multimillonario, quien fue sancionado por EE.UU. el año pasado. Sin embargo, no proporcionó detalles sobre el origen de esta cifra.
Deripaska señaló que Estados Unidos nunca estuvo tan cerca de la bancarrota de las finanzas públicas.
“Imprimir más dinero es inútil. Por lo tanto, en el Congreso discutirán tranquilamente cómo subir el techo de la deuda”, explicó.
“Muchas cabezas rodarán esta primavera en Washington”, dijo, y agregó que esto allanará el camino para la paz en 2025.
Según el fundador de la segunda compañía de aluminio más grande del mundo, Rusal, Washington también enfrenta el problema de los depósitos no garantizados en bancos regionales que ascienden a casi $17 billones.
A principios de esta semana, fuentes no identificadas le dijeron a Bloomberg que el Departamento del Tesoro de EE. UU. está revisando si los reguladores federales tienen suficiente autoridad de emergencia para asegurar temporalmente depósitos superiores al límite actual de $ 250,000 en la mayoría de las cuentas. Según se informa, la medida está siendo solicitada por la Coalición de Bancos de Tamaño Medio de América, que incluye bancos con activos de hasta $ 100 mil millones.
El sector bancario de EE. UU. se ha visto afectado recientemente por una ola de quiebras después de los colapsos a principios de este mes de Silicon Valley Bank y Signature Bank. La agitación se ha extendido a Europa, envolviendo al segundo prestamista más grande de Suiza, Credit Suisse, que se vio obligado a fusionarse con el banco de inversión rival UBS.
Según Deripaska, el rescate de emergencia no detendrá la crisis, que también descarrilará al Grupo UBS.