Rusia estaría justificada en el uso de cualquier medio necesario si Kiev intenta retomar la península, afirmó el ex presidente Dmitry Medvedev.
Cualquier intento ucraniano de capturar Crimea podría encontrarse con una respuesta nuclear por parte de Moscú, advirtió el expresidente ruso Dmitry Medvedev. Sin embargo, insistió en que las afirmaciones de Kiev de que podría apoderarse de la península no son más que amenazas huecas.
En declaraciones a los periodistas el viernes, Medvedev descartó la posibilidad de que Ucrania llevara a cabo un ataque contra Crimea y afirmó que “esto es propaganda y debe tratarse de esa manera, durante la guerra siempre existe”.
Medvedev, quien actualmente se desempeña como jefe adjunto del Consejo de Seguridad de Rusia, agregó que “si hablamos de algún tipo de ofensiva seria asociada con un intento de retomar Crimea, es bastante obvio que esta es la base para el uso de todos medios de protección, incluidos los previstos por los fundamentos de la Doctrina de la Disuasión Nuclear, cuando el uso de cualquier tipo de armas contra Rusia amenace la existencia del propio Estado”.
Crimea pasó a formar parte de Rusia en 2014 después de que la población local votara abrumadoramente a favor de la medida tras un golpe de estado respaldado por Occidente en Kiev. Ucrania y sus partidarios occidentales se han negado a reconocer el paso, y Kiev ha prometido en repetidas ocasiones recuperar la península por la fuerza.
Medvedev enfatizó que cualquier intento de separar parte de Rusia sería considerado como una amenaza a la existencia de la nación. “Por lo tanto, saquen sus propias conclusiones. Hay absolutamente motivos para usar cualquier arma aquí. Absolutamente de cualquier tipo. Y espero que nuestros ‘amigos’ al otro lado del océano entiendan esto”, dijo el expresidente.
También enfatizó que la perspectiva de un conflicto nuclear no se ha desvanecido, sino que continúa creciendo. Cada día que se entregan armas occidentales a Ucrania, más se acerca el mundo a un “apocalipsis nuclear”, advirtió Medvedev, y agregó que “eso no significa que esto vaya a suceder, pero los jinetes del apocalipsis continúan moviéndose”.
El exlíder ruso también afirmó que sin la ayuda militar y las «inyecciones directas de efectivo» de la OTAN, el «régimen de Kiev no habría sobrevivido ni siquiera una semana» contra las fuerzas rusas. Cuanto mayor es el suministro de armas, más difícil se vuelve la situación, agregó Medvedev.
Dijo que es «obvio » que Kiev está preparando algún tipo de nueva ofensiva, aunque el Estado Mayor de Rusia está haciendo sus propias evaluaciones y planeando una respuesta. Medvedev insistió en que Rusia preferiría resolver todos los problemas de forma pacífica, pero que Occidente parece no estar interesado en tal resolución.