El presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha abogado por dejar de usar la expresión «países hostiles», pues considera que quienes realmente tienen actitudes beligerantes y antirrusas no son sus pueblos, sino las élites y gobernantes
«La expresión ‘países hostiles’ ha entrado en nuestra conciencia pública y está en circulación, pero no refleja con precisión las realidades existentes», ha advertido este jueves el mandatario ruso, según recoge la agencia de noticias TASS.
En este contexto, el presidente Putin ha lamentado que el sistema político de varios países del mundo «en muchas ocasiones haya elevado a la cima» a personas con «un nivel de educación y cultura general bastante bajo».
«El resultado, como sabe, es obvio. Su trabajo es perjudicial para su propia población y sus propios intereses», ha concluido el jefe de Estado ruso.
Rusia cuenta con un listado de países hostiles en el que están incluidos un total de 54 países, entre los que destacan todos los Estados miembro de la Unión Europea, Reino Unido, Estados Unidos, Australia y Canadá, entre otros.