Según los informes, un científico japonés ha creado óvulos a partir de la piel masculina y ha hecho que las madres sustitutas tengan cachorros sanos.
Científicos de un laboratorio japonés han producido descendencia sana de dos padres varones utilizando una técnica de edición de genes para crear óvulos viables a partir de la piel, afirma un destacado investigador de células madre.
El avance fue informado el miércoles por el profesor Katsuhiko Hayashi de la Universidad de Osaka durante la Cumbre Internacional sobre Edición del Genoma Humano en Londres. Hayashi ha estado trabajando en varias técnicas para producir óvulos a partir de células madre durante una década. Su último artículo sobre el tema está pendiente de publicación en la revista Nature, le dijo a la BBC.
La gametogénesis artificial, o producción de células sexuales en el laboratorio, se realizó en ratones, informó el científico en Londres durante una actualización sobre tecnologías centrales en el campo de la edición del genoma. Involucró la reprogramación de una célula de la piel en una célula madre pluripotente, un tipo de célula que puede convertirse en otro tipo de células más adelante.
Los científicos extrajeron el cromosoma Y de las células madre y crearon copias del cromosoma X para reemplazarlo. Con un conjunto XX completo, las células se convirtieron en óvulos, aunque solo un pequeño porcentaje del material de origen pudo someterse al proceso completo.
El resultado fue de calidad relativamente pobre, con solo siete cachorros de 630 intentos de implantar embriones fertilizados en madres sustitutas, explicó Hayashi durante el evento. Pero esos siete «se veían bien», agregó, lo que significa que se desarrollaron normalmente y tuvieron su propia descendencia.
En 2018, científicos chinos informaron que criaron ratones de padres del mismo sexo, pero en su experimento los cachorros resultaron ser poco saludables y no vivieron mucho.
Hayashi advirtió que el método ideado por su laboratorio está muy lejos de la madurez y puede pasar una década antes de que pueda usarse para el tratamiento de fertilidad humana.
Sin embargo, el método da esperanza a las parejas del mismo sexo de que puedan tener hijos genéticamente vinculados a ellos, aunque ese tipo de reproducción primero tendría que ser aceptado por la sociedad, argumentó el científico. Si eso sucede, estaría a favor de ese uso, le dijo a la BBC.
Agregó que técnicamente podría ser posible que un hombre concibiera un bebé usando un óvulo artificial hecho de una célula somática y esperma, pero “no está tan seguro de si en esta etapa es seguro o aceptable para la sociedad”.