Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos señalaron el aumento de casos de infección bacteriana por Shigella, causante de diarrea, la cual consideraron una grave amenaza para la salud
Las pruebas sugieren que la propagación del padecimiento es entre los hombres homosexuales y bisexuales en particular, aparentemente a través del contacto sexual, tanto en esta nación norteamericana como en el extranjero, informó el canal NBC News.
Esa agencia precisó en una reciente alerta sanitaria sobre el incremento de la proporción de los aproximadamente 450 mil casos anuales de Shigella en Estados Unidos que eran resistentes a todos los tratamientos antibióticos conocidos.
Según detalló, esa relación aumentó de cero en 2015, a 0,4 por ciento en 2019, y a cinco por ciento el año pasado, indicador de una posible mayor propagación.
La Shigella, causante de la afección diarreica conocida como shigelosis y altamente infecciosa, es transmitida cuando la materia fecal infectada entra en la boca o la nariz.
El contagio puede ser incluso a través de la actividad sexual o debido a un lavado de manos deficiente después de cambiar pañales, manipulación de alimentos insalubres o nadar en agua contaminada. La infección suele afectar a niños pequeños.
El Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades emitió el viernes una alerta sobre 221 casos confirmados y 37 posibles entre las personas que viajaron a Cabo Verde desde septiembre y regresaron a sus hogares en una docena de países, entre ellos Estados Unidos.
La doctora Stephanie Cohen, del Departamento de Salud Pública de la ciudad de San Francisco, declaró a NBC News que la Shigella es “un patógeno realmente importante”.
“Puede causar diarrea realmente grave, a veces sanguinolenta, calambres y dolor abdominal”, explicó la experta.
La shigelosis suele desaparecer sin tratamiento, pero los médicos pueden recetar antibióticos para acelerar la recuperación o evitar complicaciones en los pacientes más vulnerables.
La infección a veces causa una enfermedad prolongada y debilitante, y unos seis mil 400 pacientes estadounidenses necesitan hospitalización cada año.
La muerte por este padecimiento es rara, aunque es más probable en los casos de personas inmunodeprimidas, agregó la televisora.