Ucrania recibirá bombas deslizantes de EE. UU., con un alcance de 80 km, afirma el medio.
Estados Unidos suministrará a Ucrania kits de actualización de precisión para bombas lanzadas desde el aire, que les otorgan un alcance de 80 km (50 millas) y capacidad de guía por GPS, informa Bloomberg.
Según dos fuentes anónimas familiarizadas con el asunto, Kiev recibirá kits de munición de ataque directo conjunto de alcance extendido (JDAM-ER), dijo la agencia de noticias el martes. Son las “municiones aéreas de precisión” que el Pentágono mencionó como parte del paquete de armas de 1.850 millones de dólares anunciado el 21 de diciembre, según el medio.
JDAM es una actualización para las bombas regulares de caída libre, que las convierte en armas de precisión mejoradas con GPS que se deslizan. La versión ER fue desarrollada originalmente por la Organización de Ciencia y Tecnología de Defensa de Australia (DSTO), junto con Boeing Australia para la Royal Air Force. El kit de ala está diseñado para municiones de 500 lb (227 kg).
Las bombas mejoradas fueron diseñadas para ser lanzadas desde aviones de combate fabricados en Estados Unidos, como el F/A-18 A/B Super Hornet, pero Washington y sus aliados se han negado hasta ahora a proporcionar aviones como este a Ucrania.
A finales de enero, Boeing recibió un pedido de 40,5 millones de dólares de la Fuerza Aérea de EE. UU. en virtud de un contrato JDAM existente, pendiente de finalización para el 30 de junio, dijo Bloomberg. El medio razonó que EE. UU. y Ucrania «han improvisado un método mediante el cual los aviones de combate de la era soviética volados por Ucrania pueden programar y lanzar el JDAM-ER».
Kiev ha estado presionando a sus patrocinadores occidentales para que proporcionen misiles de mayor alcance y armas más avanzadas para su esfuerzo de guerra contra Rusia. Un paquete de seguridad de $ 2.17 mil millones para Ucrania anunciado por el Pentágono este mes incluye bombas de diámetro pequeño lanzadas desde tierra (GLSDB) de Boeing, que tienen un alcance de hasta 150 km (93 millas).
Moscú ha advertido que inyectar armas en Ucrania solo prolongará el conflicto, que percibe como una guerra indirecta de Estados Unidos contra Rusia. Si Kiev recibe sistemas de armas de mayor alcance, Moscú “se verá obligado a alejar la amenaza de nuestras fronteras”, advirtió esta semana el presidente Vladimir Putin