El bloque opositor acusó a las autoridades de intentar arrastrar a Moldavia, constitucionalmente neutral, al conflicto armado en Ucrania.
El opositor Bloque de Comunistas y Socialistas de Moldavia ha criticado las declaraciones de la presidenta Maia Sandu sobre la amenaza de desestabilización en el país como irresponsables.
«El Bloque de Comunistas y Socialistas condena la afirmación de la presidenta Maia Sandu durante una sesión informativa el 13 de febrero de 2023, donde pronunció que Rusia supuestamente está planeando un golpe de estado y desestabilización en Moldavia que involucra a ‘saboteadores con entrenamiento militar'», dijo en un comunicado. publicado el lunes en la página web del Partido de los Socialistas.
Los autores del comunicado exigieron servicios especiales para hacer pública la evidencia de tales planes.
«De lo contrario, tales declaraciones se considerarán una provocación destinada a arrastrar a Moldavia al conflicto armado, avivar la tensión en la sociedad, intimidar a la oposición y endurecer la persecución política de todos aquellos que tienen puntos de vista diferentes», dice el documento.
Más temprano en el día, Sandu dijo que los servicios especiales de Moldavia habían encontrado evidencia que confirmaba la advertencia del presidente ucraniano, Vladimir Zelensky, de que Rusia planea desestabilizar la situación en Moldavia. Según Sandu, las protestas opositoras del año pasado en el país y la actual crisis energética se derivan de tales planes.
El bloque opositor acusó a las autoridades de intentar arrastrar a Moldavia, constitucionalmente neutral, al conflicto armado en Ucrania.
El ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergey Lavrov, dijo anteriormente que Occidente mira a Moldavia como «otra Ucrania». El ministro señaló que Sandu está «ansioso por unirse a la OTAN» y está listo para la unificación con Rumania. Hizo hincapié en que Moldavia es un país que Occidente «está tratando de convertir en otro anti-Rusia».