Las huelgas sindicales en Francia por la reforma de las pensiones prevista por el gobierno provocarán graves trastornos en el transporte público el martes, dijeron el domingo el ministro de Transporte y varias autoridades del transporte público.
Los sindicatos han convocado un día nacional de huelgas y manifestaciones y esperan repetir la gran participación que se vio en la primera gran protesta del 19 de enero, cuando más de un millón de personas marcharon contra la reforma. Las huelgas de ese día también detuvieron trenes, bloquearon refinerías y frenaron la generación de energía.
«Será un día difícil, muy difícil para el transporte público… Esperamos grandes interrupciones», dijo el ministro de Transporte, Clement Beaune, en LCI TV.
El operador ferroviario nacional SNCF dijo en un comunicado que el tráfico se vería seriamente afectado en toda su red el martes debido a la huelga y recomendó que las personas cancelen o retrasen sus viajes o trabajos desde casa.
Los boletos ya comprados para el período comprendido entre las 6 pm del lunes 30 de enero y las 8 am del miércoles 1 de febrero serán reembolsados en su totalidad, dijo SNCF.
RATP, el operador de transporte público de la región de Ile-de-France alrededor de París, también dijo que las líneas de metro y los trenes suburbanos sufrirán graves interrupciones el martes.
La autoridad de aviación civil francesa, DGAC, dijo en un comunicado que había pedido a las aerolíneas que redujeran sus programas de vuelo en un 20% en el aeropuerto de París Orly el martes, pero agregó que, a pesar de esta medida preventiva, se podrían esperar retrasos e interrupciones.
El ministro de Transporte, Beaune, dijo que el gobierno seguía abierto a más conversaciones con los sindicatos, pero dijo que el gobierno del presidente Emmanuel Macron mantendría el objetivo clave de la reforma de aumentar la edad de jubilación en dos años a 64.
«El corazón de la reforma no cambiará», dijo.
El gobierno quiere aumentar gradualmente la edad de jubilación en tres meses por año a partir de septiembre, hasta 2030, y también planea aumentar el tiempo de cotización de los trabajadores a la seguridad social.
Los sindicatos, incluido el sindicato moderado CFDT, están unidos contra la reforma y han prometido continuar con las huelgas y manifestaciones hasta que el gobierno abandone sus planes.
Macron ha dicho que fue elegido en una plataforma para reformar las pensiones y que sin los cambios, el sistema de pensiones de Francia no puede seguir siendo financieramente viable.