Corea del Norte criticó al liderazgo de las Naciones Unidas por lo que describió como «doble rasero» ejercido por la organización internacional en el cumplimiento de sus obligaciones nucleares para mantener la paz y la estabilidad mundiales.
El programa nuclear y de misiles de Corea del Norte fue descrito recientemente por el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, como un «peligro claro y presente, que lleva los riesgos y las tensiones geopolíticas a nuevas alturas».
La Agencia Central de Noticias de Corea (KCNA), el medio estatal oficial de Pyongyang, emitió un comunicado el sábado de Jo Chol Su, un alto funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Norte, en el que criticó a Guterres por tener «el típico doble rasero».
El alto funcionario dijo que al ejercer un doble rasero, el jefe de la ONU estaba cometiendo el «peligroso acto de destruir la confianza de la comunidad mundial en la ONU».
Jo reprendió a Guterres por ignorar la «acumulación de armas imprudente» por parte de Estados Unidos que «trae constantemente todo tipo de medios de ataque nuclear a la península de Corea y la región».
En su declaración, Jo también acusó a Japón de no tener «calificación moral y legal» para ser parte del Consejo de Seguridad de la ONU debido a su pasado colonial y de guerra.
El alto funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores de Corea del Norte reiteró que su país nunca renunciará a su arsenal nuclear, que Pyongyang ve como una fuerza de disuasión con fines puramente defensivos contra los enemigos de la nación.
Los comentarios de Jo se produjeron después de que Estados Unidos elogió el viernes a Tokio por su nueva postura militar agresiva.
Japón está dando un gran paso adelante y lo está haciendo al unísono con Estados Unidos, sus socios en el Indo-Pacífico y en Europa”, dijo el asesor de seguridad nacional de Estados Unidos, Jake Sullivan, en un comunicado.
“La inversión del presidente Biden en nuestras alianzas está dando enormes dividendos para reforzar la disuasión y promover la paz y la seguridad en el Indo-Pacífico y en todo el mundo”, dijo el funcionario.
En diciembre, Tokio se comprometió a aumentar su presupuesto militar al dos por ciento del PIB para 2027.
La expansión de cinco años de su presupuesto militar incluye ¥ 5 billones ($ 38 mil millones) para comprar un crucero Tomahawk de fabricación estadounidense, lo que le daría a Tokio la capacidad de atacar objetivos en China.