Rusia y Brasil están dispuestos a reforzar relaciones tras la investidura del presidente electo brasileño, afirma la delegación de Moscú en país latinoamericano.
El presidente ruso, Vladímir Putin, ha enviado un mensaje escrito a su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, lo que muestra ambos países están listos para compartir la visión de un mundo futuro multipolar y justo, confirmó la delegación de Moscú tras reunirse el sábado con Lula.
“Entregué un mensaje escrito del presidente de la Federación Rusa al muy respetado presidente brasileño y le confirmé también que le esperamos en Moscú en cuanto su agenda se lo permita”, aseveró la jefa de la Cámara Alta del Parlamento de Rusia, Valentina Matvienko, que también ha sido representante de Rusia durante la ceremonia de investidura de Lula este domingo.
En este sentido, Matvinko aclaró que el presidente de Brasil ha confirmado su deseo e interés en reanudar las relaciones ruso-brasileñas en muchos campos. “El nuevo presidente electo ha confirmado la disposición y el interés en una especie de reanudación de las relaciones ruso-brasileñas en términos del aumento del volumen de la cooperación comercial y económica, en la esfera científica, en la esfera técnica, en la esfera medioambiental y de otros tipos”, subrayó.
Destacó que Lula apoyó la necesidad de activar el Consejo Empresarial Ruso-Brasileño, “que trabaja muy eficazmente” en ambos países, “estableciendo contactos y conexiones”. También, puso énfasis en que las relaciones comerciales entre las dos naciones “se están desarrollando con gran dinamismo” y dijo que se espera que alcancen unos 9000 millones de dólares este año.
“Es muy importante que Rusia y Brasil comparten la misma visión de un mundo futuro, un mundo multipolar y justo, por lo que tenemos amplias oportunidades de establecer una cooperación y coordinar nuestras acciones en la ONU (la Organización de las Naciones Unidas) y otros ámbitos internacionales”, concluyó la jefa de la delegación rusa.
Lula da Silva ha sido investido este domingo presidente de Brasil (por tercera vez), dos meses después de derrotar en las elecciones a su rival, Jair Bolsonaro.