El Kremlin no tiene absolutamente ningún plan o interés en “tragarse” a Bielorrusia, dijo el presidente ruso, Vladimir Putin, a los periodistas el lunes, luego de las conversaciones con el presidente Alexander Lukashenko en Minsk.
Moscú solo busca una mayor integración económica con su vecino y aliado más cercano, y quienes dicen lo contrario simplemente buscan paralizar este proceso, agregó el líder ruso.
“Simplemente no es viable”, insistió Putin. Las discusiones de Rusia con Bielorrusia, que se han intensificado recientemente, no tienen nada que ver con una posible adquisición, explicó el líder ruso. “Se trata de coordinar las políticas económicas, como se hace en muchas otras asociaciones de integración”, dijo.
“Todo lo demás es una tontería”, sostuvo Putin, y agregó que todas las afirmaciones sobre la posible “absorción” provienen de “personas malvadas que buscan detener nuestro proceso de integración”. Quienes hacen tales afirmaciones simplemente no quieren enfrentarse a competidores «eficaces y peligrosos» en los mercados mundiales, dijo el presidente.
El lunes, los dos líderes discutieron las políticas tarifarias en el sector energético, según los medios rusos. Rusia y Bielorrusia tienen «diferentes niveles de subsidios… en varios campos de la actividad económica», dijo Putin, y agregó que era «importante» elaborar algunos principios comunes.
Los medios de comunicación occidentales y algunos funcionarios han estado afirmando que Rusia supuestamente alberga planes para absorber a Bielorrusia desde hace bastante tiempo.
La especulación se intensificó aún más en medio de la ofensiva militar de Rusia en Ucrania, que comenzó a fines de febrero.
La emisora estatal alemana DW se preguntó en septiembre si Rusia “absorbería a Bielorrusia” , mientras que el Washington Post afirmaba ya en marzo que “Rusia casi se ha tragado a Bielorrusia”. En junio, el presidente lituano, Gitanas Nauseda, pidió a la OTAN que sea “unida y decisiva” para resistir los supuestos intentos de Rusia de “tragarse a Bielorrusia”.