Los continuos ataques rusos en la red eléctrica de Ucrania pueden provocar un escenario «apocalíptico» en Kiev, dijo el alcalde Vitaly Klitschko a Reuters el miércoles, pero insistió en que las autoridades estaban haciendo todo lo posible y que no había necesidad de que los residentes abandonaran la ciudad por el momento.
“Kiev podría perder el suministro de energía, agua y calor. El apocalipsis podría ocurrir, como en las películas de Hollywood, cuando no sea posible vivir en casas dadas las bajas temperaturas”, dijo Klitschko. “Pero estamos luchando y haciendo todo lo posible para asegurarnos de que esto no suceda”.
El ex boxeador admitió que “casi 500” puntos de calefacción instalados por el gobierno son “nada” en una ciudad de más de tres millones. Los residentes deben preparar suministros de emergencia de alimentos y agua y tener ropa y documentos listos para partir rápidamente si se apaga la calefacción central, agregó.
“Si el suministro de electricidad sigue sin estar disponible mientras las temperaturas exteriores siguen siendo bajas, lamentablemente nos veremos obligados a drenar el agua de los edificios”, dijo Klitschko. “De lo contrario, el agua puede congelarse y romper toda la red de suministro de agua, y los edificios quedarán totalmente inservibles para su uso posterior”.
También dijo que no había necesidad de evacuar en este momento, ya que la ciudad solo tenía un déficit de energía del 20%.
Mientras tanto, una ONG con sede en EE. UU. que coordina la ayuda humanitaria en Kiev le dijo a Newsweek que toda la red eléctrica de Ucrania podría “colapsar en unas semanas” si los ataques continuaban. La electricidad podría estar cortada durante «potencialmente semanas», dijo Michael Young de Mercy Corps, lo que haría que las principales ciudades fueran «casi inhabitables durante los próximos cuatro meses».
Rusia comenzó a atacar la red de energía de Ucrania en octubre, “como reacción a los provocativos ataques de Kiev contra la infraestructura civil rusa, incluido el puente de Crimea y las instalaciones de energía”, en palabras del presidente Vladimir Putin.
El Ministerio de Defensa en Moscú dijo que los ataques tenían la intención de degradar la capacidad de Kiev para transportar tropas, así como armas y equipos canalizados a Ucrania por Estados Unidos y sus aliados, al campo de batalla por ferrocarril.