El experto recordó que las naciones de la Unión Europea (UE) acordaron este viernes un límite máximo regulado de 60 dólares por barril para el crudo ruso suministrado por vía marítima.
Esta decisión debería ser aprobada este sábado por el Consejo de la UE, y se espera que se introduzca un mecanismo de ajuste que exija que el precio de las importaciones de petróleo ruso sea al menos un cinco por ciento inferior al precio de mercado.
El tamaño del tope en sí mismo es irrelevante porque las empresas rusas no venderán petróleo por ese precio de todos modos, apuntó Melnikov.
En consecuencia, se interrumpirán los envíos de petróleo ruso con la ayuda de transportistas y aseguradoras europeas, lo que podría reducir las exportaciones de Rusia en un millón. O millón y medio de barriles diarios en diciembre-enero, lo que elevará los precios, expresó este especialista.
Por su parte, Aleksánder Potavin, analista principal de la empresa Finam, declaró que el tamaño del límite máximo aprobado por la UE permitiría que el petróleo ruso Urals conserve una parte importante del mercado mundial.
Anteriormente, Rusia anunció que no suministrará recursos energéticos a los países que limiten los precios de estas materias primas, y consideró inaceptable la introducción del tope de precios.