El presidente de Rusia, Vladímir Putin, le dijo al canciller de Alemania, Olaf Scholz, que los ataques a la infraestructura crítica en Ucrania fueron una respuesta forzada de Moscú a los atentados de Kiev, incluido el ataque al puente de Crimea, informaron desde el Kremlin.
«Las Fuerzas Armadas rusas se habían abstenido durante mucho tiempo de apuntar con misiles a ciertos objetivos en territorio ucraniano, pero ahora tales medidas se han convertido en una respuesta forzada e inevitable a los ataques provocadores de Kiev contra la infraestructura civil rusa, incluyendo el puente de Crimea y las instalaciones energéticas», señala el comunicado.
Asimismo, el mandatario ruso, durante una conversación telefónica con el canciller alemán, precisó que el apoyo político y financiero a Kiev lleva a Ucrania a rechazar de plano la idea de las negociaciones.
«Todo esto, así como el apoyo político y financiero completo a Ucrania, hace que Kiev rechace de plano la idea de cualquier negociación. Además, anima a los ultranacionalistas radicales ucranianos a cometer más y más crímenes sangrientos contra la población civil», se lee en el documento.
A inicios de octubre, fue registrada una fuerte explosión en el puente de Crimea, que conecta la península con Rusia continental. El accidente se cobró la vida de tres personas y provocó el incendio de siete vagones cisterna de un tren.
Además, tras recibir el informe del Comité de Investigación de Rusia sobre lo ocurrido en el puente de Crimea, Putin consideró que dicha explosión fue «un ataque terrorista para destruir infraestructura civil crítica de la Federación de Rusia» y responsabilizó a los servicios especiales ucranianos de ejecutar este atentado.