El proyecto de ley, que conlleva fuertes multas para los infractores, se convertirá en ley después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, lo apruebe.
El Consejo de la Federación, la cámara alta del parlamento de Rusia, aprobó el miércoles un proyecto de ley que impone una prohibición total de la ‘propaganda’ LGBTQ, la pedofilia y el cambio de sexo.
El proyecto de ley, que ahora se convertirá en ley después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, lo apruebe, prohíbe la respectiva ‘propaganda’ en libros, películas, medios y publicidad.
La legislación sobre la “protección de los valores tradicionales” fue respaldada por unanimidad de los 153 senadores presentes en la sesión de la cámara, sin abstenciones ni oposición. La semana pasada, la legislación fue aprobada por la Duma Estatal, la cámara baja del parlamento de Rusia, y allí también recibió un apoyo unánime.
El proyecto de ley, que ahora se convertirá en ley después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, lo aprobara, prohíbe la respectiva ‘propaganda’ en libros, películas, medios y publicidad. Sin embargo, las nuevas reglas no se aplican a los videojuegos, ya que los legisladores acordaron que este campo requeriría una legislación separada.
Roskomnadzor, el organismo de control de los medios de comunicación de Rusia, tendrá la tarea de monitorear el contenido de los medios en busca de propaganda ilegal y bloquear el material ofensivo disponible en Internet.
La legislación es efectivamente un seguimiento de una ley de 2013 que prohibió la difusión de propaganda LGBTQ entre niños menores de 18 años en el país. La nueva ley, sin embargo, se aplica universalmente tanto a menores como a adultos.
Si bien el proyecto de ley no introduce una responsabilidad penal para los infractores, así como para los reincidentes, conlleva fuertes multas tanto para las personas como para las organizaciones que lo infrinjan. Las personas corren el riesgo de incurrir en una sanción de 400.000 rublos (6.600 dólares) y las entidades corporativas una sanción de hasta cinco millones de rublos (alrededor de 83.000 dólares) por promover la ‘propaganda’ LGBTQ.
Aquellos que promuevan la pedofilia enfrentarían multas del doble de esa cantidad. Los ciudadanos extranjeros se enfrentarían a multas de hasta 800.000 rublos (12.000 dólares), así como a la expulsión del país.