El primer ministro palestino critica a Israel por apoderarse de dos tercios de los recursos hídricos de Palestina

 

El primer ministro palestino, Mohammad Shtayyeh, criticó al régimen israelí por apoderarse de dos tercios de los recursos de agua subterránea palestinos en Cisjordania ocupada y desviarlos hacia ciudades y asentamientos ilegales para extremistas judíos.

Shtayyeh hizo los comentarios en una rueda de prensa antes de la Cuarta Conferencia Árabe sobre el Agua organizada por Palestina bajo el lema «Seguridad del agua árabe para la vida, el desarrollo».

La conferencia de dos días se inaugurará oficialmente en la capital egipcia de El Cairo el miércoles.

“Israel roba 600 millones de metros cúbicos de los 800 millones de metros cúbicos de Palestina y los desvía hacia sus ciudades y asentamientos”, dijo Shtayyeh.

El primer ministro palestino señaló que un colono israelí promedio consume 430 litros de agua por día, mientras que un palestino solo consume 72 litros, mucho menos que el promedio mundial de 120 litros.

Después de 1967, “Israel comenzó a cavar pozos de agua en Cisjordania más profundos que los palestinos, lo que llevó a controlar la mayor parte de las aguas subterráneas y el secado de los manantiales”, dijo Shtayyeh.

Agregó que tales medidas israelíes han afectado la transformación del patrón agrícola en los territorios palestinos.

Según funcionarios palestinos, el régimen israelí controla directamente el 85 por ciento de los recursos hídricos en Cisjordania y también controla cómo se distribuye el resto.

Mientras tanto, la Autoridad Palestina está buscando licencias israelíes para cavar pozos adicionales en Cisjordania para abordar la necesidad apremiante de más agua.

Las autoridades israelíes se niegan a otorgar las licencias necesarias a las autoridades palestinas del agua para operar libremente en el Área C estratégicamente sensible de Cisjordania ocupada, ya sea perforando pozos adicionales o instalando bombas de refuerzo.

Mientras los palestinos sufren escasez crónica de agua, los colonos israelíes ilegales cercanos disfrutan de cantidades ilimitadas no solo para beber, sino también para regar cultivos y lavar sus vehículos.

Los tanques de agua en blanco y negro están omnipresentes en los techos de las casas palestinas en las ciudades y pueblos de Cisjordania, y se llenan cuando sus grifos de agua literalmente se secan durante semanas.

Por el contrario, estos tanques rara vez se ven en los asentamientos vecinos porque el agua está disponible las 24 horas y nunca se corta.

 

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