La Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN, por sus siglas en francés) suspendió este lunes el funcionamiento del Gran Colisionador de Hadrones, el mayor acelerador de partículas del mundo, según los datos de monitorización en línea del estado del colisionador. Este año, el aparato terminó su actividad dos semanas antes de lo previsto debido a la necesidad de ahorrar energía.
La organización anunció a finales de septiembre la apagada del colisionador. Todos los años, la organización detiene el funcionamiento del acelerador durante el invierno en la llamada ‘parada técnica de fin de año’. Esta suspensión durará hasta marzo de 2023.
Sin embargo, este año el CERN había acordado un cierre anticipado del colisionador con el proveedor de electricidad, Électricité de France. La decisión se tomó «para hacer frente a posibles cortes de energía en los próximos meses». Además, el funcionamiento del complejo de aceleradores se reducirá en un 20 % en 2023.
Estas no son las únicas medidas que la organización ha implementado este año para ahorrar energía en sus instalaciones. Otra de ellas es posponer un mes el inicio de la temporada de calefacción, y se está aplicando una ligera reducción de la temperatura. «El ahorro de energía es una responsabilidad cotidiana de todos y todos podemos contribuir al esfuerzo colectivo», afirma la entidad.