Hasta dos meses podrían tardar los resultados para probar que Ucrania fabricó una bomba sucia

Mijaíl Uliánov, representante permanente de Rusia ante las organizaciones internacionales en Viena, dijo que los resultados del examen de las muestras tomadas por especialistas del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) en Ucrania para comprobar posibles rastros de una «bomba sucia» podrían darse a conocer en mes y medio o dos meses.
Los expertos del OIEA viajaron a Kiev y a Zholtie Vodi luego de que Moscú alertara sobre la elaboración de una bomba sucia por parte de las Fuerzas Armadas de Kiev, un hecho que el Kremlin ya había denunciado semanas atrás ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU), sin que su queja tuviera eco en la comunidad internacional.
«Los especialistas han tomado muestras ambientales, que son la herramienta más importante de la que dispone el OIEA. Estas muestras han sido enviadas a laboratorios certificados. El resultado se conocerá, posiblemente, en un mes y medio. Todo dependerá de la velocidad de trabajo de cada uno de los laboratorios, que actúan de forma independiente», comentó a Sputnik el funcionario ruso.
Uliánov mencionó que los resultados de las pruebas podrían difundirse a finales de diciembre o principios de enero. Solo entonces, dijo, será posible dar una respuesta más o menos segura a la pregunta de si se ha creado o no una bomba sucia en los tres puntos nucleares señalados previamente por las autoridades rusas.
El 24 de octubre pasado, el director del OIEA, Rafael Grossi, anunció que los expertos del organismo se estaban preparando para visitar dos instalaciones nucleares en Ucrania tras haber recibido informes de actividad sospechosa realizada en ellas.
El 3 de noviembre, el organismo señaló que sus inspectores habían completado las inspecciones en tres lugares de Ucrania tras una solicitud de Kiev y que no habían identificado ninguna actividad no declarada en ellos. No obstante, el OIEA advirtió que seguiría realizando visitas y pruebas para descartar riesgos para la población.
Medios de comunicación reportaron que el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, afirmó en una conversación telefónica con el ministro de Defensa ucraniano, Alexéi Réznikov, que Washington rechaza las advertencias de Moscú sobre las intenciones del Gobierno de Zelenski de fabricar una bomba sucia.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos explican que una bomba sucia es una combinación de explosivos, como la dinamita y el polvo o los perdigones radiactivos. También se le conoce como dispositivo de dispersión radiológica (RDD).
A diferencia de un arma nuclear, una bomba sucia no puede generar una explosión atómica; sin embargo, esto no significa que sea inofensiva.
Una bomba atómica, como la que lanzó Estados Unidos sobre Hiroshima y Nagasaki, implica la división de átomos y una enorme liberación de energía que produce una potente onda expansiva e irradiación. Una bomba sucia, en cambio, funciona de forma completamente diferente, ya que «se utiliza dinamita u otros explosivos para dispersar polvo radiactivo, humo u otro material con el fin de provocar una contaminación radiactiva», de acuerdo con los CDC.