Desde el primer día del operativo lanzado por Moscú en territorio ucraniano, los países occidentales han mostrado su firme apoyo a Kiev, brindándole las asistencia militar necesaria para hacer frente a las tropas rusas. Sin embargo, sus posturas habrían sido considerablemente discrepantes antes del 24 de febrero.
Así lo ha revelado en una entrevista con CNN Portugal el ex primer ministro británico Boris Johnson, según el cual las autoridades alemanas creían que una rápida derrota ucraniana resultaría económicamente más beneficiosa que un conflicto largo.
«El punto de vista alemán fue, en determinado momento, que si iba a suceder [la operación militar rusa], lo que sería un desastre, entonces sería mejor que todo terminara rápidamente y que Ucrania cediera», dijo el político, agregado que Alemania, uno de los países que más dependen del gas ruso, esgrimió «todo tipo de razones económicas sólidas».
Francia, por su parte, se «negaba» a aceptar la posibilidad de un eventual operativo por parte de Moscú. «No hay duda de que los franceses se negaron hasta el último momento», apuntó el ex jefe del Gobierno británico.
Johnson también criticó la respuesta inicial de Italia ante la amenaza del operativo ruso. Según explicó, el Gobierno italiano, entonces encabezado por Mario Draghi, «simplemente dijo que no podría apoyar la posición que estábamos adoptando», alegando a su «enorme» dependencia de los hidrocarburos rusos.
Sin embargo, los países europeos cambiaron rápidamente de opinión tras el 24 de febrero, cuando arrancó la operación militar rusa en Ucrania. «Lo que ocurrió fue que todo el mundo —alemanes, franceses, italianos, todo el mundo, [el presidente de EE.UU.] Joe Biden— vio que, simplemente, no había opción. Porque no se podía negociar con este tipo [el presidente ruso Vladímir Putin]. Ese es el punto clave», apuntó el ex primer ministro, agregando que la Unión Europea (UE) «ha hecho un gran trabajo» desde entonces.
«Después de todas mis angustias… rindo homenaje a la forma en la que ha actuado la UE. Han estado unidos. Las sanciones han sido duras», recalcó.
En cuanto a las negociaciones entre Rusia y Ucrania, aseguró que el presidente ucraniano, Vladímir Zelenski, «llegaría a un acuerdo si pudiera», aunque subrayó que «no se puede confiar en Putin».
Asimismo, reveló que había mantenido una conversión con el mandatario ruso en la que se dio cuenta de que las motivaciones de su operativo «no tenían que ver con Ucrania». «Se trataba de él y del papel que imagina como hombre que va a reconstruir el imperio soviético, se trata de ser el nuevo Pedro el Grande», concluyó.