El presidente ruso, Vladimir Putin, y su homólogo cubano, Miguel Díaz-Canel, se han comprometido a profundizar su amistad frente a su «enemigo común», Estados Unidos.
Putin recibió este martes a Díaz-Canel en Moscú, donde develaron un monumento de bronce al líder revolucionario cubano Fidel Castro, a quien Putin elogió como un hombre «brillante».
El presidente ruso también elogió la amistad de décadas de su país con Cuba y dijo que los dos países necesitan aumentar aún más la cooperación.
“Siempre nos hemos opuesto a todo tipo de restricciones, embargos, bloqueos, etcétera”, dijo Putin a Díaz-Canel.
Rusia se ha visto afectada por las sanciones estadounidenses por el conflicto en Ucrania, y Cuba ha estado bajo un embargo económico estadounidense durante más de seis décadas.
El líder cubano, por su parte, dijo que tanto Rusia como Cuba “están sujetas a sanciones injustas y arbitrarias que continúan, y tienen un enemigo común, el imperio yanqui que manipula gran parte del mundo”.
Dirigiéndose al parlamento ruso, Díaz-Canel respaldó a Rusia en su confrontación con Occidente y dijo que Moscú debe mantenerse firme.
«Las razones del actual conflicto en esta zona hay que buscarlas en la política agresiva de Estados Unidos y la expansión de la OTAN hacia las fronteras de Rusia», dijo.
Putin declaró lo que llamó «una operación militar especial» contra Ucrania el 24 de febrero. Dijo en ese entonces que la ofensiva estaba destinada a «desnazificar» a Ucrania.
Antes de declarar la campaña militar, Moscú había estado exigiendo garantías legalmente vinculantes de que Ucrania nunca sería admitida en la OTAN.
Desde el comienzo de la guerra, Estados Unidos y sus aliados de la OTAN han suministrado armamento por valor de miles de millones de dólares a Ucrania e impuesto oleadas de sanciones contra Rusia.