NASA: Antes de 2030 habrá humanos vivendo y trabajando en la Luna

El responsable de la misión Artemis 1 de la NASA, Howard Hu, pronosticó que los astronautas utilizarían «hábitats y róveres» en la superficie lunar.

La nave espacial Orion, diseñada para transportar humanos, fue lanzada la semana pasada desde el Centro Espacial Kennedy, en Florida (EE.UU.), tras una serie de retrasos debidos a fallos técnicos y huracanes que impidieron que el cohete Space Launch System (SLS) despegara el 29 de agosto de este año, según estaba previsto.

En el interior de la Orion se encuentran tres ‘pasajeros’ que ayudarán a calibrar el funcionamiento de los sistemas y que recopilarán datos para las futuras misiones tripuladas. En lugar del comandante, fue colocado el maniquí ‘Moonikin Campos’, equipado con dos sensores para registrar la aceleración y la vibración durante la misión.

En los otros dos asientos adicionales se encuentran ‘Helga’ y ‘Zohar’, dos torsos de maniquíes que imitan los huesos humanos, los tejidos blandos y los órganos de una mujer adulta. A diferencia de ‘Helga’, ‘Zohar’ llevará puesto un chaleco de protección contra la radiación. Ambos maniquíes cuentan con 5.600 sensores para medir la radiación.

«Es el primer paso que damos hacia la exploración del espacio profundo a largo plazo, no solo para Estados Unidos, sino para el mundo», dijo Hu. Creo que es un día histórico para la NASA, pero también es un día histórico para todas las personas que aman los vuelos espaciales tripulados y la exploración del espacio profundo», agregó.

La primera misión del programa espacial Artemis de la NASA tendrá una duración de 42 días, tiempo durante el que está previsto que la Orion recorra 450.000 kilómetros desde la Tierra hasta la Luna, para luego desplazarse otros 64.000 kilómetros más allá de la cara oculta de nuestro satélite, donde la nave espacial se desplazará en una órbita retrograda distante.

La NASA planea lanzar en 2024 la misión Artemis 2, la primera tripulada con destino a la Luna desde que en 1972 tuvo lugar la última misión Apolo 17, y que utilizará una versión aún más potente del cohete SLS.

«Vamos a volver a la Luna. Estamos trabajando para conseguir un programa sostenible y este es el vehículo que llevará a la gente que nos hará volver a la Luna«, declaró el jefe del programa.