Pisando fuerte. Así han entrado los republicanos una vez se supo que dominan la Cámara de Representantes. Apenas confirmaron que llevarían las riendas, empezó la catarsis, y sobre Biden empezó a cernirse el infierno tan temido, en el cual nunca le hubiera gustado caer. Pero llega el pasado, y también el presente, a pedirle que rinda cuentas.
Biden recibe los primeros latigazos de los republicanos
KO. Como en el boxeo. En la lona. Así puede acabar el presidente de EEUU, Joe Biden, y lo que pensó que podría ser un paseo en el parque cuando asumió la presidencia hace poco menos de dos años, se puede convertir en un auténtico infierno.
Así, el congresista de la Cámara de Representantes James Comer acusó a Biden de ser «presidente de la junta directiva» de los negocios de su familia. Afirmó que la Casa Blanca gastó más de 250.000 dólares para desviar las historias negativas sobre Hunter.
«Se trata de una investigación sobre Joe Biden, el presidente de los EEUU, y sobre por qué mintió al pueblo estadounidense sobre su conocimiento y participación en los planes de negocios internacionales de su familia», disparó Comer a discreción.
Pero había más noticias para el boletín de Joe Biden. Al anunciar una investigación contra el inquilino de la Casa Blanca, Matt Gaetz, congresista republicano del distrito de Florida, lanzó un aviso a navegantes: «Estoy aquí como miembro del Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes para decir que los días del dinero y equipo militar interminables para Ucrania, están contados».
Y para estrechar el cerco sobre la logia Biden-Zelenski-FTX-Partido Demócrata, un grupo de congresistas republicanos envió una misiva al secretario de Estado de EEUU, Antony Blinken. «Miles de millones de dólares de contribuyentes [estadounidenses] enviados a Ucrania para la ayuda de combate, podrían haber sido potencialmente invertidos en la bolsa del intercambio de criptodivisas FTX, que posteriormente hizo enormes donaciones a los demócratas en EEUU durante las elecciones de mitad de mandato de 2022», se puede leer en la carta.
«El escenario que está pasando es similar a lo que se esperaba, pero complica lo que es su agenda [de Biden] política interna, porque en política exterior están iguales. Esto obliga a actuar con más fuerza, con más decisión, con más voluntad política al presidente Biden, que, sobre todo, se ha visto como un presidente débil», señala al respecto el analista internacional Rolando Dromundo.