CHISINAU — Moldavia necesita la ayuda por valor de 1.100 millones de euros para combatir la crisis económica y de energía, declaró el vice primer ministro y titular de Exteriores moldavo, Nicu Popescu.
«La situación es muy difícil. Estamos experimentando dificultades debido a la reducción del suministro de gas ruso. El Gobierno busca proveedores alternativos, pero Moldavia necesita la ayuda financiera de 1.100 millones de euros», afirmó Popescu en el Foro de Paz de París, citado en los canales de Telegram moldavos.
El ministro señaló que otro tramo de ayuda financiera a la república se discutirá en la próxima reunión de donantes extranjeros en el marco de la Plataforma de Apoyo a Moldavia, que se llevará a cabo en París el 21 de noviembre.
La creación de esa plataforma fue anunciada por Alemania, Francia y Rumanía durante una conferencia internacional celebrada en abril pasado en Berlín. Entonces, nueve organizaciones internacionales y 36 países donantes prometieren destinar a Chisinau 695 millones de euros, en forma de subvenciones, préstamos y ayuda humanitaria. La segunda reunión del organismo se llevó a cabo en julio en Bucarest.
Moldavia atraviesa una crisis energética debido al encarecimiento de los carburantes y se plantea apagar el alumbrado público, bajar la temperatura en los hogares y ampliar la educación a distancia para reducir el consumo de gas en invierno en un 15% como mínimo.
Desde el 1 de agosto, la compañía Moldovagaz dejó de prestar sus servicios a los clientes que tienen deudas.