Defendemos decididamente los esfuerzos de los países en desarrollo para asegurar los mecanismos financieros requeridos con el fin de enfrentar las pérdidas y daños provocados por el cambio climático, afirmó la ministra cubana de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, Elba Rosa Pérez, en una entrevista con la televisora egipcia Al Balad News.
Abogamos por enfocar mejor los debates para la definición de una nueva meta financiera, basada en las necesidades de las naciones con menos recursos, expresó la funcionaria, quien se encuentra en esta ciudad egipcia para participar en la 27 Conferencia de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP27).
Sobre la labor de Cuba en la materia, la ministra destacó que en abril último se aprobó una actualización de la Ley del Sistema de Recursos Naturales y del Medio Ambiente, “que dispone de un enfoque integral, moderno e inclusivo para lograr el desarrollo sostenible del país”.
Además, resaltó, se actualizan normativas jurídicas para el enfrentamiento al cambio climático y la protección de las costas.
También se elabora e implementa por períodos quinquenales la Estrategia Ambiental Nacional, que traza acciones para atender problemas como la contaminación, la pérdida de la biodiversidad y la degradación de los suelos, puntualizó.
Asimismo, se refirió a los esfuerzos realizados para la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que “permitieron avanzar en la sostenibilidad ambiental del país”.
Cuba cuenta con un programa científico para combatir el cambio climático, mediante el cual cada año se determinan las proyecciones de lo que ocurrirá en las costas cubanas con la elevación del nivel medio del mar para 2050 y 2100, apuntó.
Por ejemplo, subrayó, de 2018 a 2020 se realizaron vertimientos de arena en varias playas a lo largo de todo el país, con más de 500 mil metros cúbicos.
Sobre los vínculos entre la isla y Egipto, reveló que se trabaja en un Memorando de Entendimiento que incluye varias áreas de trabajo, entre ellas el cambio climático, la protección de la biodiversidad, la reducción de la degradación ambiental, la gestión sostenible e integrada de los recursos hídricos y las energías renovables.
Tenemos la voluntad de elevar la colaboración técnica entre ambos países para complementar las buenas relaciones políticas existentes, afirmó.