El asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, quien realizó el pasado viernes una visita no anunciada a Kiev, planteó el tema de la crisis ucraniana y propuso que no se debe descartar la vía diplomática para resolver el conflicto, informaron a NBC News tres personas familiarizadas con las reuniones que tuvo Sullivan con altos cargos ucranianos y el presidente del país eslavo, Vladímir Zelenski.
«Estaba tanteando un poco el terreno», dijo una fuente refiriéndose a las conversaciones que mantuvo el representante de Washington con los funcionarios de Kiev para ver si es posible que las partes rusa y ucraniana volvieran a la mesa de negociaciones.
Según un funcionario ucraniano, Sullivan habló de la necesidad de una solución diplomática al conflicto armado y señaló que la influencia de Ucrania se vería reforzada, no debilitada, si se muestra dispuesta a negociar con Moscú.
Además, la fuente recalcó que Sullivan no trató de presionar a Kiev para que entrara en negociaciones inmediatamente o para que diera algún paso concreto. En su lugar, el asesor de Seguridad Nacional opinó que Ucrania podría mantener mejor el apoyo de los aliados occidentales si expresa su voluntad de poner fin al conflicto a través de la diplomacia.
Al mismo tiempo, Occidente no quieren empujar a Ucrania a las negociaciones, especialmente si eso implica un acuerdo formal para reconocer como territorio ruso las zonas donde se realizaron los recientes referéndums, dijeron funcionarios estadounidenses y ucranianos.
Las tres fuentes también señalaron que Washington y sus aliados han discutido si el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, podría ayudar a mediar entre Moscú y Kiev, mientras que el mandatario turco ya ha señalado su voluntad de ayudar a negociar un acuerdo.