Irán alza la voz para enfatizar que la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) no debería estar bajo el control de las grandes potencias.
En declaraciones ofrecidas en una sesión de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el representante permanente de Irán ante el organismo, Amir Said Iravani, subrayó que la energía nuclear desempeña un papel fundamental en el desarrollo socioeconómico de los países y uno de las responsabilidades de la AIEA es facilitar el uso pacífico de esta energía a sus Estados miembros.
En este contexto, declaró que el deber de la Agencia de verificar las actividades e incluso las preocupaciones sobre la proliferación nuclear no debe convertirse en un obstáculo en el camino del uso pacífico de la energía atómica que supone un derecho inalienable de sus miembros.
“La AIEA debe actuar como un organismo imparcial, independiente y profesional, alejándose del control de poderes para que todos los países puedan contar con su apoyo técnico en el desarrollo de los programas nucleares pacíficos”, reclamó.
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Iravani destacó la cooperación de Irán con la AIEA, afirmando que no ha quedado ningún problema con respecto al Acuerdo de Salvaguardias entre Teherán y el organismo nuclear de la ONU.
Al respecto, precisó que Irán se ha mantenido comprometido con sus obligaciones de Salvaguardias y está listo para implementar completamente el acuerdo nuclear si otras partes cumplen plenamente con las suyas.
Teherán remarca que la Agencia Internacional de Energía Atómica ha corroborado varias veces que las actividades nucleares de la República Islámica de Irán son pacíficas y que no ha observado ninguna desviación en su programa, por lo que insiste en cierre de los expedientes correspondientes para que no se utilicen como palanca de presión.
Recalca que aceptará la verificación de sus actividades nucleares más allá del Acuerdo de Salvaguardias de la AIEA solo si las partes del acuerdo nuclear de 2015, conocido oficialmente como el Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC o JCPOA, por sus siglas en inglés), cumplen con sus obligaciones según el pacto y levantan las sanciones impuestas a Teherán.