En Grecia se lleva a cabo una huelga nacional por los precios altos y los salarios bajos. Las protestas tienen lugar en Atenas, Tesalónica y otras grandes ciudades del país, miles de personas exigen el aumento de los salarios mínimos y las pensiones, además del restablecimiento del sistema de negociación colectiva y el fin de la inflación.
Los sindicatos, entre los que se encuentra la Confederación General de Trabajadores Griegos (GSEE) que representa a más de dos millones de trabajadores, convocaron a un paro de 24 horas en protesta por el aumento de los costos energéticos, la inflación y el incremento del costo de vida.
El sindicato comunista Frente General de Lucha (PAME) reunirá a sus partidarios cerca del Propileo y se dirigirá a la plaza central de la capital, Síntagma, cerca del edificio del Parlamento.
El PAME pide «rechazar las políticas antipopulares que crean pobreza, hambre, explotación y guerra, que dejan a la gente en el frío para calentar los beneficios de los empresarios». Entre las demandas se encuentran los aumentos sustanciales de los salarios y las pensiones, una negociación colectiva que garantice un trabajo estable y con derechos, electricidad barata y bienes de primera necesidad para la población.
El sindicato reclama un salario mínimo de 825 euros en el sector privado y un 20% más en el sector público, rebajar los precios de la energía, la supresión de los impuestos especiales y el IVA sobre el petróleo, la gasolina, el gas natural y la electricidad, así como una reducción en los precios de los productos de primera necesidad como los alimentos, la ropa, entre otros, y la no imposición de los ingresos de 12.000 euros al año.
Actualmente, el salario mínimo en Grecia es de 713 euros al mes.
Además de los trabajadores del transporte público, anunciaron su participación los empleados de todos los medios de comunicación del país, así como los funcionarios de la administración local, los profesores, los marineros, los empleados de la principal compañía aérea griega Aegean Airlines y de su filial Olympic Air. Todavía no se sabe si los marinos y los empleados de las compañías aéreas harán cambios en sus horarios de trabajo como consecuencia de las sentencias judiciales.
GSEE afirmó que el mundo del trabajo y la sociedad en general se encuentran en una situación difícil debido al aumento vertiginoso del costo de la energía y los precios de los artículos esenciales, además las prestaciones no resuelven los problemas.
El Comité Ejecutivo de Adedy exige un aumento inmediato a los salarios de los servidores públicos.
Durante 12 años, los trabajadores del sector público no solo no recibieron un aumento salarial sino que recibieron recortes de hasta un 40% y cancelaron los salarios 13 y 14, se lee en el comunicado.