Rusia dice haber detenido a nueve fuerzas especiales de Ucrania que planeaban llevar a cabo “ataques terroristas contra los altos funcionarios” en Jersón.
El Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB, por sus siglas en ruso) ha anunciado este martes el arresto de un grupo de nueve personas, de nacionalidad ucraniana, que intentaba asesinar a “altos funcionarios” de la Administración de la provincia de Jersón, región recién independizada de Ucrania, según informa la agencia local Tass.
El desmantelado “grupo de sabotaje y reconocimiento” operaba bajo el mando del Servicio de Seguridad de Ucrania (SBU, por sus siglas en ucraniano), agrega el informe.
A los detenidos se les ha incautado un vehículo cargado de explosivos, más de cinco kilos de explosivos plásticos, detonadores eléctricos, tres granadas, armas pequeñas y municiones, así como equipos especiales de reconocimiento.
Según el reporte, los autores intelectuales de ataques, identificados como Samir Shukiurov, Viktor Jomyak y Dmitri Sidei, se encuentran escondidos fuera de Rusia.
Jesón es una de las cuatro regiones recién liberadas por Rusia que optaron por adherirse a Rusia en referéndums celebrados en septiembre. Otras tres zonas son Zaporiya, y las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, en el Donbás (este ucraniano).
Desde entonces Kiev no ha dejado de atacar infraestructuras en las zonas liberadas. El domingo, las fuerzas ucranianas lanzaron seis misiles HIMARS contra la central hidroeléctrica de Kajovskaya, situada en Jersón. Rusia interceptó cinco misiles, pero uno impactó contra la esclusa de la presa, dejando sin electricidad y agua a los residentes.
“Las Fuerzas Armadas de Ucrania no cejan en sus intentos de destruir la represa de la central hidroeléctrica Kajovskaya y crear las circunstancias para un desastre humanitario”, escribió la agencia local Ria Novosti, citando a los servicios de emergencia locales.