Pyongyang ha respondido a las acusaciones de EE.UU. de apoyar a Moscú con municiones de artillería para el conflicto de Ucrania
Un alto funcionario de defensa de Corea del Norte dijo el martes que Pyongyang no está suministrando armas a Rusia y no tiene la intención de hacerlo en el futuro. La declaración se produjo después de que Washington acusara la semana pasada a Corea del Norte de enviar de forma encubierta proyectiles de artillería a Rusia para apoyar su campaña contra Ucrania.
Estados Unidos “difunde persistentemente un rumor infundado sobre tráfico de armas” entre Moscú y Pyongyang para “convertirlo en un hecho consumado a toda costa”, afirmó el subdirector de Asuntos Exteriores Militares del Ministerio de Defensa de Corea del Norte, citado por Pyongyang. Agencia Central de Noticias de Corea (KCNA), administrada por el estado.
El funcionario continuó señalando que Corea del Norte considera tales movimientos de Washington como un «intento hostil de empañar la imagen» de la nación en el ámbito internacional al «invocar la resolución de sanciones ilegales» del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, refiriéndose al posible futuro intentos de EE. UU. de buscar nuevas restricciones sobre presuntos envíos de municiones.
“Dejamos en claro una vez más que nunca hemos tenido ‘negocios de armas’ con Rusia y que no tenemos planes de hacerlo en el futuro”, reiteró el funcionario.
El portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, afirmó la semana pasada que Estados Unidos había recibido información de que Corea del Norte estaba suministrando a Rusia una cantidad «significativa» de proyectiles de artillería.
Kirby alegó que Pyongyang estaba tratando de ocultar los envíos desviándolos a través de países africanos y del Medio Oriente, y agregó que Washington consultaría con la ONU sobre cómo responsabilizar a Corea del Norte por tales pasos. Kirby también admitió que Washington no sabía si Rusia realmente había recibido las municiones, pero estaba tratando de monitorear los envíos.
Sus comentarios fueron repetidos por el portavoz del Departamento de Estado de EE. UU., Ned Price, quien sugirió que Washington podría imponer nuevas sanciones a Corea del Norte por enviar armas a Rusia.
En septiembre, funcionarios estadounidenses confirmaron un hallazgo de inteligencia estadounidense recientemente desclasificado de que Rusia estaba en proceso de comprar millones de cohetes y proyectiles de artillería de Corea del Norte. Más tarde, Corea del Norte desestimó ese informe y pidió a Washington que dejara de hacer “comentarios imprudentes” y que “mantuviera la boca cerrada”.